ESTAMOS EN LA PELEA
EL SALVADOR GANO A CURAZAO Y AUN TIENE OPCION DWE PASAR A CUARTOS
Ni tan malos cuando pierden ni tan buenos cuando ganan. Solo un grupo en busca de una identidad de juego, torpedeada por los que se supone que deberían ayudarle en el camino y una vez más inmersa en su enésimo proceso. Luego de varias de arena, ayer a El Salvador le tocó una de cal. Ganó 2-0 a Curazao y se sacudió un poco de la presión por el debut con pie izquierdo en Copa Oro.
El combinado cuscatleco reaccionó ante una respondona selección de Curazao, que metió en apuros en la primera parte del encuentro pero no encontró cómo definir sus chances. A cambio, El Salvador tuvo la puntería que siempre le suele faltar y defendió su ventaja con sufrimiento en la primera mitad y mejor disposición en la segunda.
En efecto, el partido de ayer dejó en evidencia el avance caribeño y el estancamiento cuscatleco. En los primeros 15 minutos ya los de Curazao eran cualquier cosa menos facilito. Ya sumaban tres aproximaciones sobre el arco de Derby Carrillo y no se veía por dónde pudiera circular el balón para que El Salvador botara presión.
Sin embargo, por mucho que hayan mejorado los caribeños, todavía no se desprenden de todas sus malas mañas. En un abrir y cerrar de ojos, en dos minutos, los pupilos del colombiano Eduardo Lara apelaron a la técnica de sus atacantes y resolvieron la ventaja en la pizarra.
Primero, al 21', Gerson Mayén y Fito Zelaya se inventaron una doble pared en el área que desubicó a los centrales curazoleños. El “10” quedó solo ante el meta y definió con un remate abajo.
Luego, al 23', en un contragolpe veloz, Bonilla recibió por el sector izquierdo y vio Fito despegarse de la espalda de su marcador por derecha. Con un pase bien medido, encontró a Fito, que controló y orientó el balón al mismo tiempo y pudo cruzar al portero caribeño para poner un 2-0 merecido por la pegada pero que lucía inesperado por el trámite con que había comenzado el duelo.
La tónica se equilibró con los tantos cuscatlecos, pero aun así Curazao pudo empujar. Se acercó al arco que defendió Derby Carrillo en lugar del lesionado Benji Villalobos y metió miedo cuando recibió un penalti a favor. Empero, Derby espantó fantasmas lanzándose abajo a su derecha ante el cobro de Nepomuceno y tapando el remate que pudo haber cambiado la historia del duelo.
El segundo tiempo fue un partido entre dos equipos sueltos. Opciones en ambos arcos, más en el lado caribeño pero ya sin puntería para aumentar. Dos goles, tres puntos. Oxígeno. Al fin.
Intentamos quitarles el balón y tenerlo nosotros. Manejamos los ritmos del partido para controlarlos”.
EDUARDO LARA,
técnico de El Salvador