Alimentos que reducen el riesgo de y los que predisponen su aparición
De acuerdo con la Sociedad Americana contra el Cáncer (American Cancer Society, ACS, por sus siglas en inglés), si bien los factores hereditarios juegan un papel determinante en la posibilidad de padecer cáncer colorrectal o pólipos, existen otros factores controlables, como el peso corporal, la alimentación y la actividad física, que reducen su riesgo o, en su defecto, contribuyen a la aparición de esta enfermedad si no se les da la importancia debida.
DIETA EQUILIBRADA
Se deben evitar las carnes rojas y procesadas. La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera carne roja a la carne de res, ternera, cerdo, cordero, caballo y cabra; y como carne procesada a toda aquella transformada para mejorar su sabor o conservación, en la que se incluyen: jamón, salchicha, carne seca, carne enlatada y salsas a base de carne, que al cocinarlas a altas temperaturas o en contacto directo con la llama, como la barbacoa o el sartén, producen más de ciertos tipos de químicos cancerígenos.
De forma contraria, los alimentos que contienen calcio, pueden reducir el riesgo de padecer cáncer colorrectal, pues minimizan la recurrencia de pólipos; sin embargo, su consumo debe ser moderado porque el exceso de este frecuentemente se asocia al aumento del riesgo de cáncer de próstata. El calcio se puede encontrar en productos lácteos y alimentos vegetales de hoja verde; para el caso de los lácteos, se recomienda escogerlos bajos en grasa o sin grasa. También se sugiere escoger alimentos como el pescado –fuente de vitamina D–, frutas y verduras, fibras como los cereales, pan integral y avena.