MARN reportó 28 réplicas del sismo frente a la costa
Medio Ambiente descarta que haya actividad volcánica relacionada con el fuerte sismo del pasado lunes.
Después del sismo magnitud 6.0 frente a la desembocadura del río Lempa, en la costa de San Vicente, reportado a las 5:23 de la tarde del pasado lunes, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) registró 28 réplicas, con magnitudes entre 2.9 y 5.3; 11 fueron sentidas. Hasta las 10 de la mañana de ayer, se habían reportado 23. “La que hubo hoy (ayer) a las 10 de la mañana fue la de mayor magnitud, la de 5.3. Esa es una tendencia que podríamos decir normal para la zona, y por lo que nosotros recomendamos a la población estar atenta a la información que el ministerio y el sistema de Protección Civil les esté dando”, dijo el viceministro de MARN, Ángel Ibarra.
Agregó que se realizó una inspección y que no hay daños de importancia reportados en instalaciones de salud y educación, y que las comisiones departamentales no reportaron mayores emergencias.
Los sismos se generaron en la zona de subducción que están frente a la costa del Pacífico. “No hay por hoy fallamiento local ni hay actividad volcánica. El que ha estado más activo que ha sido el de San Miguel, en este periodo ha estado dentro de los límites relativamente normales”, dijo.
También explicó que no se trata de un enjambre sísmico en la zona. “Casi siempre se dan por fallamiento local o actividad volcánica, este no es el caso. Tiene que ser en una zona determinada y usualmente vinculado al fallamiento local. Este es un sistema normal”, afirmó Ibarra.
Tampoco hay advertencia de tsunami. “Y mejor que los sismos se estén dando en esa magnitud. Si hubiera un silencio sísmico, eso tuviera un nivel de advertencia algo más importante”, agregó.
Mientras que diputados de la comisión de relaciones exteriores, integración centroamericana y salvadoreños en el exterior de la Asamblea Legislativa decidieron ayer dar dictamen favorable para que se ratifique un canje de notas con el Gobierno del Japón para que el país reciba un donativo de 400 millones de yenes japoneses, aproximadamente $3.9 millones, para la adquisición de equipos de prevención de desastres.
Esto se implementaría en el Programa del Desarrollo Económico y Social de El Salvador.
“Si hubiera un silencio sísmico, eso tuviera un nivel de advertencia algo más importante”. ÁNGEL IBARRA, VICEMINISTRO MEDIO AMBIENTE