Paro nacional deja en silencio a Nicaragua
Las calles en Nicaragua estaban vacías ayer, a pesar de que el oficialismo celebró su fiesta sandinista. Los opositores mantuvieron su paro de 24 horas.
La celebración del “repliegue”, una de las fiestas más importantes del oficialista Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) de Nicaragua, se realizó ayer sin la fiesta previa que acostumbra cada año, en un día en que los nicaragüenses cumplieron un paro nacional contra el gobierno. Por primera vez en 39 años, la carretera a Masaya, que sirve de escenario para el “repliegue”, una caminata de 29 kilómetros, permanecía en un silencio únicamente interrumpido por el motor de algunos vehículos que se desplazaron en ella, algo extraño en una vía en la que circulan cerca de 250,000 automóviles por día.
En las horas previas al “repliegue”, que va de Managua a Masaya, únicamente pudo observarse un ambiente algo festivo en una rotonda ubicada en el kilómetro 14, donde una bandera gigante de Nicaragua dio paso a numerosas banderas rojinegras del FSLN.
El extraño silencio que precedió al “repliegue” era de esperarse, ya que coincidió con un paro nacional de 24 horas, el segundo desde que estalló la crisis el 18 de abril pasado.
El paro fue convocado por una gran alianza cívica y ha sido secundado tanto por empresarios como trabajadores, comerciantes, estudiantes, campesinos, profesionales y productores, entre otros sectores.
La calma previa también se explica en que el “repliegue” esta vez