Llovizna dificulta rescate de cadáveres
Las esperadas lluvias llegan a California, que sigue ardiendo
Una llovizna en algunas zonas del norte de California ayudaría ayer a los bomberos que combaten un incendio forestal mortífero, pero también elevaría el riesgo de inundaciones y complicaría la labor de quienes buscan restos humanos. Se pronosticaban lluvias más intensas hoy en la zona de Paradise, donde un incendio forestal mató a por lo menos 81 personas y destruyó más de 13,000 viviendas.
CASI DOS SEMANAS DESPUÉS DE QUE SE DESATÓ EL INFIERNO, APENAS 60 PERSONAS HABÍAN BRINDADO MUESTRAS A LOS LABORATORIOS PORTÁTILES PARA BUSCAR A SUS FAMILIARES.
Residentes de poblaciones afectadas por un incendio en la zona de Los Ángeles apilaban sacos de arena mientras se preparaban para chaparrones que podrían provocar aludes de unas laderas desprovistas de vegetación tras el paso de las llamas.
Los meteorólogos dicen que las lluvias en zonas recientemente incendiadas del sur de California podrían causar deslaves de rocas y barro.
En Paradise, 225 kilómetros (140 millas) al noroeste de San Francisco, las cuadrillas removían cenizas y escombros en busca de cadáveres.
Hay casi 870 personas con paradero desconocido.
Las precipitaciones entorpecerían la búsqueda al arrastrar restos fragmentarios y convertir la ceniza en una pasta espesa.
Las autoridades que tratan de identificar los restos utilizan un análisis de ADN que da resultados en apenas dos horas. El sistema analiza el ADN de fragmentos óseos u otros restos y los compara con material genético provisto por familiares de los desaparecidos. Esta tecnología depende de que la gente se presente para dar una muestra de ADN.