UNA VISITA MASIVA PARA PANAMÁ
SON 226,000 LOS PEREGRINOS QUE SE HAN INSCRITO PARA LA JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD. LA DELEGACIÓN OFICIAL DE EL SALVADOR ES DE 1,200, PERO SE ESPERA QUE VIAJEN UNOS 4,800 MÁS CON DIFERENTES PARROQUIAS DEL PAÍS.
De hecho, las cangureras siguen a la venta los últimos días para tratar de tener un excedente que les pueda cubrir algunos gastos o emergencias en suelo panameño durante la JMJ.
La tarea comenzó en diciembre de 2016, cuando el padre Winter les dio el aval para que los sábados pusieran su puesto de ventas.
“Algunos sábados vendíamos arroz en leche; en otros, pan dulce con café; en otros, atoles de diferentes tipos para variar. Mi mamá nos animaba a seguir con las ventas”, dice Emilio. Las cangureras fueron la última invención. Con las maletas ya casi listas, viajarán el 23 vía aérea hasta Costa Rica, y desde allí seguirán por tierra en bus. Para costearse el boleto de ambos, han tenido que reunir $2,000, que son todos los costos necesarios. PERIODISTAS, APROXIMADAMENTE, SON LOS QUE SE HAN ACREDITADO PARA DAR COBERTURA A LA JMJ, SEGÚN DICE LA OFICINA DE PRENSA.
ROMERO Y FRANCISCO
El joven tiene dos motivaciones para llegar hasta Panamá: una es que el copatrono de la JMJ es san Óscar Arnulfo Romero; la segunda, la admiración que tiene por el papa Francisco. Para él, son dos modelos para la juventud.
“Es una dicha que tengamos un santo y que ahora sea el copatrono. Él fue una gran persona, luchaba por los pobres, dio la vida por los pobres y eso motiva a cualquiera y motiva ir a la Jornada Mundial”, dice Emilio sobre san Romero.
Su hermana coincide con él en el significado que tiene el santo salvadoreño, no solo para los jóvenes del país, sino para todos los que se darán cita en el país del canal este enero. “Fue un gran hombre, tuvo mucho valor y nos dejó como enseñanza ese mismo valor de luchar por los pobres”.
Junto con los hermanos González de la parroquia Santa María de la Encarnación viajarán 63 personas, incluido el sacerdote en la delegación, quienes se alojarán en la Basílica Nuestra Señora de Guadalupe. Ellos no saben si en el mismo lugar habrá delegaciones de otros países. Solamente saben que todo está listo para ser recibidos e instalarse para la jornada.
Pero más allá de san Romero también está el papa Francisco. El joven dice que no saben si podrán estar muy cerca de él, pero obviamente lo verán y escucharán su mensaje directamente. Emilio asegura que ese mensaje le ha hecho cambiar su vida.
“Yo escucho muchas de las reflexiones del papa, me gustan, me ayudaron a mejorar mi carácter, con mi mal humor. Era superenojado”, dice Emilio. Ahora ve cumplido uno de sus sueños. Dice que va para “redescubrir cuál es su misión en la vida”.
Para Luz Eunice, si algo le ha impactado del pontífice es su liderazgo y la apertura que ha dado en la Iglesia católica, algo que los jóvenes de todo el mundo deben aprovechar en esta JMJ.
“Él tiene un gran don. Tiene el espíritu para saber llevar a las personas hacia adelante. Él sabe guiar a los demás”, explica sobre el prelado de la Santa Sede.
El sueño panameño ya está a unos cuantos días para los dos jóvenes. Como ellos, otros miles de todo el país preparan su viaje para estar presentes en la Jornada Mundial de la Juventud. Algunos hasta ya viajaron como “mochileros”, dicen los coordinadores.
El 23 de enero, Emilio y Luz Eunice tomarán un avión rumbo a Costa Rica. Una vez allí emprenderán el viaje por tierra hacia Panamá, donde el 24 a las 5:30 de la tarde estarán frente a Francisco.