Cárcava de 15 metros obliga a restringir carril
FOVIAL tendrá que destinar los recursos para hacer la intervención de la cárcava que se generó por el colapso de un drenaje durante las últimas lluvias.
Las lluvias de los últimos días habrían causado el colapsó de un drenaje y la formación de una cárcava en el carril de oriente hacia San Salvador en la carretera Panamericana Este-oeste (conocida como carretera de Oro), a la altura del kilómetro 15, por lo que la circulación vehicular está restringida en ese sector. La cárcava tiene 15 metros de longitud en la carretera, 6 metros de profundidad aproximadamente y 1 metro de ancho hacia adentro de la calle.
“Lo que nos dicen es que al parecer por estas lluvias recientes hubo un taponamiento del drenaje de la carretera que hizo que se colapsara, imaginamos que había algunas ramas, porque en realidad cuando colapsó se fue parte del drenaje y se han ido bloques de suelo”, explicó Emilio Ventura, viceministro de Obras Públicas.
Las intervenciones de esta cárcava serán asumidas por el Fondo de Conservación Vial (FOVIAL). “Se va a hacer un relleno de lodocreto para tapar la cárcava y también se va a hacer como una especie de gradas, como forma de bermas para proteger ese punto, no hacerlo vertical”, agregó.
La carretera tiene dos carriles de circulación en el sentido de oriente a San Salvador, y se ha restringido
el tráfico a uno. Se tiene previsto colocar reductores de velocidad unos 50 metros antes y colocar la señalización de precaución, mientras se ejecuten los trabajos.
Ventura dijo que esperan llevar el tema al consejo directivo de FOVIAL la próxima semana para determinar si los trabajos se harían con la empresa contratada para el mantenimiento vial de la carretera y si necesitarían un refuerzo financiero a ese contrato.
Mientras que la semana pasada se adjudicó la empresa que hará los trabajos definitivos en el talud rocoso del kilómetro 19 de la autopista Los Chorros, por lo que esperan que a partir del próximo lunes inicien labores.
“Una primera etapa es remover hasta cierto nivel el material inestable. Esto lleva, entonces, a una valoración que se contempla, de ver si es necesario el uso de explosivos o si basta con alguna fuerza mecánica, de alguna máquina, para el retiro”, dijo.
Esta etapa duraría cinco meses e incluye la colocación de una malla anclada de alta resistencia. “Y hay una parte del talud que es un estrato de suelo más erosivo, que no es roca, y a este se le va a colocar un concreto lanzado. Esto para evitar que se siga lavando, más que todo para evitar que haya erosión, para protegerlo ante lluvias”, afirmó Ventura.
“Vamos a entrar lo antes posible, vemos la posibilidad de que se haga el paso sobre el carril que está habilitado ahorita”. EMILIO VENTURA, VICEMINISTRO DE OBRAS PÚBLICAS