FALLECE PIERRE CARDIN, EL DISEÑADOR QUE REVOLUCIONÓ LA MODA
CARDIN TAMBIÉN DISEÑÓ MUEBLES, ACCESORIOS, VESTUARIO DE CINE Y FUE UN EMPRESARIO CON VISIÓN GLOBAL. DEJA UN LEGADO INCOMPARABLE EN LA MODA.
El diseñador Pierre Cardin, falleció este martes a los 98 años de edad, según anunció su familia a los medios franceses. El estilista ha muerto en el hospital estadounidense de Neuilly, a las afueras de la capital francesa.
Nacido en Italia pero instalado en París desde 1945, fue el pionero del Prêt-à-porter, con lo que revolucionó el imperio de la moda.
Cardin, hombre de negocios creó un emporio con su nombre, participó con André Courrges y Paco Rabanne en la renovación de la alta costura francesa en el periodo de posguerra, cuando menos clientes podían permitirse un diseño a medida, y la alta costura pasaba por sus horas más bajas.
Fue Pierre Cardin precursor de un sistema de patronaje (creación de piezas), mediante el cual los diseños se podían producir en serie y exponer en tiendas, en distintas tallas, listos para ser llevados. Este modelo de negocio supuso una importante transformación social.
Nacido en 1922 en la pequeña localidad de Santandrea di Barbarana, cerca de Venecia, en el seno de una familia de agricultores que emigró a Francia huyendo del fascismo. Comenzó en la moda a los 14 años, en la localidad francesa de Saint-étienne, como asistente de un sastre.
En 1944, empezó a trabajar en la célebre firma Paquin, en París, donde dibujó el vestuario y las máscaras de la película de Jean Cocteau “La bella y la bestia.”
En la capital pasó por algunas de las firmas más respetadas de la moda en la primera mitad del siglo XX, como Schiaparelli y Christian Dior, que acababa de abrir su tienda por aquel tiempo.
Cardin presumió siempre de haber participado en la creación del traje de chaqueta de Dior, que se convertiría en el emblema de la firma y que dio forma al famoso “New Look“, ajustado en la cintura y voluminoso en las faldas.
En 1950, tras esa experiencia, creó su propia marca que bautizó con su nombre y que fue crucial en la revolución que vivió la industria de la moda en la segunda mitad del siglo XX, cuando la ropa a medida dio lugar a las producciones en cadena, el llamado
Prêt-à-porter, mucho más accesible que la alta costura.
En su carrera destacan una serie de piezas icónicas y su toque futurista. A pesar de vestir a celebridades como Jeanne Moureau y personalidades como Jackie Kennedy, Cardin manifestó en una entrevista en Vanity Fair que vestir a gente elegante no le interesaba.
“Mi objetivo es la calle, que mi nombre y mis creaciones estén en la calle. Las famosas, las princesas... eso no es lo mío. Las respetaba, cenaba con ellas, pero no las veía en mis vestidos. Habrían estado ridículas“, decía el diseñador sin rodeos.
En el 2014 Pierre Cardin inauguró personalmente el Museo Pasado-presente-futuro, situado en París, un espacio donde los visitantes pueden admirar su pasión por la alta costura, los complementos, la joyería y el diseño.