En alarmas
La derrota en la Supercopa deja con muchas dudas al Real Madrid y cuesta arriba para ganar en esta temporada.
a mala dinámica con la que llegó el Real Madrid a la Supercopa de España se agravó ante el Athletic Club desde la pizarra, con el planteamiento inicial fallido de Zinedine Zidane, que fue superado por Marcelino García Toral, y pasó por los dos graves
Lerrores de Lucas Vázquez, que costaron goles, y por el ocaso de la estrella que debía ejercer liderazgo, Eden Hazard. El primer título de la temporada se le escapó al Real Madrid sin llegar a disputar la final. El golpe de realidad se lo dieron el Athletic Club y Marcelino, capaz de anular desde la presión el juego madridista en la primera parte. Zidane dirige un equipo que sobrevive a impulsos, incapaz de mantener una dinámica ganadora, que comienza a acusar el cambio de filosofía y la ausencia de rotaciones.
En el fútbol de pandemia, con un calendario que presenta tres partidos por semana, es imposible triunfar apostando solamente por 14 jugadores.
La noche negra de Lucas Vázquez puso todo cuesta arriba a un equipo que carece de gol. Dos tantos de desventaja tras la mala decisión en el inicio de jugada y un penalti evitable. Desde la máxima entrega y el compromiso encontró continuidad Lucas para convertirse en indiscutible, bien como extremo o como lateral ante las ausencias de Dani Carvajal, pero carece de los automatismos de la demarcación.
Zidane no cuenta con Álvaro Odriozola, como ya ocurrió en el pasado y convierte en incomprensible la decisión de dejar salir a Achraf Hakimi, y pudo colocar a Nacho Fernández. El momento físico de Lucas le hizo pensar que podría ser importante con toda la banda libre. La apuesta le salió mal.
Por otra parte, Eden Hazard sigue en horas bajas. Uno de esos encuentros en los que el líder debe dar un paso al frente. El belga no está para eso y en su proceso de rodaje, el Real Madrid va cosechando resultados negativos.
ZINEDINE ZIDANE, TÉCNICO DEL REAL MADRID