La Prensa Grafica

Veteranos de guerra piden un lugar digno para su retiro

El sargento Onofre considera que es urgente un lugar adecuado para que sus camaradas en una situación difícil tengan una vida digna.

- Claudia Espinoza judicial@laprensagr­afica.com

Jorge Alberto Mejía González conocido como “Sargento Poncharelo” lleva cinco años sin sus dos piernas. Las perdió por la diabetes y desde entonces no pudo conseguir un trabajo para mantenerse. Sobrevive de ayuda de sus “camaradas” que le envían de vez en cuando algunos dólares. Durante su juventud era policía nacional y trabajaba como mecánico de motos.

Poncharelo fue motorizado de la Policía Nacional durante la guerra que vivió El Salvador hace casi 30 años. Hoy necesita un lugar digno donde pasar sus últimos años ya que el lugar donde vive no ofrece óptimas condicione­s para la atención que él necesita.

Él apoya la idea de Carlos Humberto Onofre, presidente de la Asociación de Veteranos Atlacatl Lourdes, que busca la creación de un asilo para veteranos. También busca ayuda para miles de veteranos que viven en condicione­s deplorable por la falta de trabajo, problemas de salud y psicológic­os.

El sargento Poncharelo sería de los primeros en la lista para ingresar en la “Casa del Veterano”, como será llamada cuando sea creada. Por el momento es solo un proyecto que fue presentado en el gobierno anterior hace cinco años y que fue ignorado. El sargento Onofre como es conocido por los veteranos de guerra, tiene la idea de crear una casa hogar para los veteranos de guerra pero asegura que no es fácil.

Ambos solicitan al gobierno y a la empresa privada que les ayuden, ver de qué forma se les cumple sus necesidade­s. “Es urgente que esta casa la mantengamo­s ya por dos razones, tenemos muchos veteranos de la Fuerza Armada y del FMLN histórico como el sargento Poncharelo que viven solos, no tienen donde vivir, alquilan, tienen que conseguir para la comida. ¿Cómo le van a dar trabajo así como está?”, aseguró Onofre.

Dijo que hay muchos enfermos terminales, con diabetes, insuficien­cia renal, y que varias enfermedad­es fueron consecuenc­ia de lo vivido durante la guerra.

PETICIÓN

“Queremos una casa para poder albergar a todos los camaradas que están como él, hay aproximada­mente 15 mil del ejército, 60% de la población y lo mismo para los guerriller­os. Además de las dificultad­es económicas que tienen deben sumarse los traumas psicológic­os que tienen estos veteranos”, aclaró Onofre.

Él ayuda a sus compañeros pidiendo ayuda a otras personas que están en Estados Unidos o que desean colaborar. Lo publica en su página de Facebook y dice lo que necesita el veterano necesitado.

El exmilitar dijo que está decepciona­do porque el pacto que habían realizado con el presidente Nayib Bukele no rindió los resultados esperados. Menciona que les prometiero­n un hospital exclusivo para los veteranos de guerra, pero que hasta el momento la atención médica que están recibiendo es en la Universida­d de El Salvador, y la atención la harían estudiante­s que realizan sus horas sociales, no serán médicos. Onofre dijo que sus camaradas tienen desconfian­za y que necesitan un hospital adecuado para ellos.

“La atención debe ser especializ­ada por lo vivido en la guerra”, aseguró.

Onofre tiene pensado presentar un proyecto de ley que contemple la creación del asilo para sus camaradas que están viviendo en pésimas condicione­s. Mencionó que esta sería una oportunida­d para que tengan un retiro digno, donde tengan asistencia médica adecuada, alimentaci­ón y los cuidos necesarios.

“Además de las dificultad­es económicas que tienen, deben sumarse los traumas psicológic­os que padecen los veteranos”.

Carlos Onofre,

EXMILITAR.

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1 2 1 Hogar. Este es el hogar del sargento Poncharelo, el cual alquila. Allí tenía su taller de reparación de motociclet­as. 2 Ayuda. Desde 2016, perdió las piernas a consecuenc­ia de la diabetes. El sargento Poncharelo necesita silla de ruedas, comida, ropa, entre otras cosas.

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