Sociedad civil rechaza proyecto petrolero
En Change.org también hay una petición contra un proyecto eólico.
rganizaciones de la sociedad civil brasileña en la región noreste del país se manifestaron contra la implantación de un proyecto petrolero y otro de energía eólica, liderados por empresas extranjeras, que, según estudios, atentan contra las comunidades locales y las especies animales.
La Carta Abierta de los Pueblos y Comunidades Tradicionales, que reúne 75 organizaciones de los estados de Sergipe, Alagoas, Pernambuco, Bahía, Río Grande do Norte y Ceará, comenzó a circular este domingo en un llamado a las autoridades para revisar la licencia ambiental para una explotación petrolera marítima.
La petrolera estadounidense Exxon Mobil, responsable de la iniciativa en el litoral del estado de Sergipe, según el manifiesto, “no consultó a todas las comunidades
Oimplicadas”, principalmente pescadores y asentamientos indígenas y de afrobrasileños que habitan en 80 municipios impactados en la región. En la Carta Abierta, las comunidades, universidades, asociaciones y grupos científicos que la respaldan piden que los pueblos impactados sean “consultados previamente, de forma libre, espontánea y de buena fe”, como prevé para este tipo de obras la Organización Internacional del Trabajo (OIT), de la cual Brasil es signataria.
El Ministerio Público Federal (MPF) recomendó a la Justicia suspender la audiencia virtual de representantes de la sociedad civil con la compañía, prevista para el 14 de septiembre, para que sea realizada bajo los parámetros de la OIT. El inicio de las obras está programado para el actual semestre.
En un comunicado, Exxon dijo que sigue las orientaciones del regulador Instituto Brasileño del Medio Ambiente -que se posicionó a favor de la audiencia el 14 de septiembre sin las normas de la OIT- y “la prioridad”, según la compañía, “es preservar la salud y seguridad de la comunidad y el medio ambiente”.
La manifestación ocurre dos años después del derramamiento de crudo en 11 estados del litoral brasileño, cuando toneladas de petróleo mancharon playas y dejaron centenas de animales muertos, en un hecho que sigue sin esclarecerse.