PADRES TEMEN QUE NIÑOS QUEDEN REZAGADOS EN SUS ESTUDIOS
Primero el covid-19 y luego un huracán. Ese es el panorama en Luisiana.
Los niños de Luisiana apenas regresaban a clases tras la interrupción de año y medio debido al COVID-19, cuando el huracán Ida azotó la región, dejándolos nuevamente sin escuela.
Casi 170,000 alumnos de escuelas públicas hoy en día no tienen ninguna escuela a donde ir en Luisiana. Las autoridades prometen reabrir los planteles en pocas semanas, pero muchos padres y docentes siguen escépticos, y temen que los niños queden rezagados en sus lecciones.
Muchos comparan lo sucedido con el huracán Katrina, que devastó a la región en 2005. Tras esa tormenta, cientos de miles de niños quedaron con problemas emocionales y lagunas educativas.
“Mis hijos están listos para regresar a la escuela, para regresar a un sitio donde tengan aire acondicionado”, expresó Tara Williams, de 32 años y madre de tres pequeños.
“Estábamos llenos de optimismo, confiados de que íbamos a derrotar al COVID y ahora recibimos otro golpe”, añadió.
“Estábamos llenos de optimismo, confiados de que íbamos a derrotar al COVID y ahora recibimos otro golpe”, expresó Jarod Martin, superintendente de escuelas en la Parroquia Lafourche.