Críticas a OEA y a Maduro marcan inicio de la CELAC
López Obrador ha sugerido que la OEA es intervencionista y una herramienta de EUA.
Exigencias para que Estados Unidos cambie su relación con la región y renovadas críticas al papel de la OEA afloraron ayer en la rápida cumbre de los líderes de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), en que también surgieron cuestionamientos contra los gobiernos de Venezuela, Cuba y Nicaragua.
El presidente de México y anfitrión de la cita, Andrés Manuel López Obrador, pidió a Washington el fin de las políticas de embargo y propuso una “nueva y vigorosa relación entre los pueblos de América”.
“Me parece que es tiempo de sustituir la política de bloqueos y malos tratos por la opción de respetarnos, caminar juntos y asociarnos por el bien de América sin vulnerar nuestras soberanías”, afirmó López Obrador, cuyo país está intentando un rol de liderazgo en Latinoamérica.
López Obrador ha sugerido que la OEA es intervencionista y una herramienta de Estados Unidos. Pero no propuso formalmente dejar la organización. Más bien, se opuso a cualquier tipo de sanciones y dijo que las cuestiones de derechos humanos y democracia sólo deben considerarse si un país acusado de violaciones lo solicita.
Los planes para combatir la pandemia del coronavirus, el cambio climático, las dificultades económicas, la defensa a la democracia y los derechos humanos y los problemas migratorios dominaron la agenda de debates, así como las críticas directas al rol de la OEA. Sin embargo, el debate de los líderes se acaloró más que todo con los cuestionamientos que hicieron algunos de los jefes de Estado a Maduro, así como a los gobiernos de Cuba y Nicaragua, criticados por reprimir protestas de descontento social en las calles.