El Salvador continúa en el último lugar de la atracción de inversión extranjera
“Uno de los principales indicadores para que crezca la economía es la inversión sectorial, es preocupante que la inversión no crezca de acuerdo a lo esperado”. Balmore López, CATEDRÁTICO UNIVERSITARIO.
a inversión extranjera directa (IED) a El Salvador continúa registrando los niveles más bajos de la región centroamericana. De acuerdo con datos del Banco Central de Reserva (BCR), en el primer trimestre de 2022 el país registró un flujo de $165.5 millones, lo cual es mucho menor si se compara con los $330 millones que registró Honduras en el mismo período o los $480 millones de Nicaragua.
Además, dicho flujo es un 31 % menor al registrado en el primer trimestre de 2019, antes de la contracción económica por la pandemia de covid-19.
Douglas Rodríguez, presidente del BCR, dijo que los $165.5 millones de flujo de inversión provinieron, principalmente, de Estados Unidos, España y México, Guatemala e islas Caimán.
Además, los sectores productivos que más concentraron la inversión fueron industria, comercio, actividades de información y comunicaciones, suministros de electricidad y transporte.
Al mismo tiempo, la formación bruta de capital (que es la inversión privada y pública local) también registró al primer trimestre de este año una reducción del 2 %, según datos del BCR.
LRodríguez explicó que dicha disminución se debió especialmente a una baja en la actividad de la construcción por el alto costo de los materiales, la maquinaria y los alquileres.
A juicio de Balmore López, catedrático e investigador universitario, uno de los principales indicadores para que crezca la economía es la inversión sectorial y “es preocupante” que la inversión no crezca de acuerdo a lo esperado.
“El problema es el tipo de inversión que viene, que se concentra mucho en el sector servicios, telecomunicaciones y bancario que no fomentan la demanda interna de insumos y no hay transferencia de conocimiento o tecnología”.
Los analistas explican que entre las dificultades que afronta la IED el encarecimiento de los costos de la cadena de suministros, especialmente combustibles, y eso impacta en el comportamiento de la inversión planificada. A eso se suma que la demanda interna está contraída.
Otto Rodríguez, analista económico, afirma que también hay que tomar en cuenta que con el alza de la tasa de interés de referencia de la Reserva Federal y la probable recesión de la economía de Estados Unidos “impactará en el encarecimiento del crédito para las empresas y una menor demanda de productos o inversión, lo cual debilita el crecimiento”.
Según estimaciones de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (FUSADES), la IED en El Salvador alcanzó los $314 millones en 2021, lo que significó un incremento de un 12.2 %, pero representó solamente un 1.1 % del PIB en 2021 y 2020.
El año pasado, Guatemala fue el país con más flujos de IED en la región, con una cifra acumulada de $3,311 millones; le siguió Costa Rica con $3,110 millones; y Panamá obtuvo $1,635 millones.
Nicaragua, aún con los problemas políticos que experimenta, registró $1,206 millones en IED en 2021 y Honduras, por su parte, accedió a $342 millones.