JUSTIFICACIÓN DEL TÉCNICO
El resultado deja a Catar como el peor anfitrión en las historia de los mundiales al quedar eliminado en primera fase.
Senegal propició la segunda derrota de la anfitriona ayer al aprovechar un error defensivo qatarí para el primer tanto de su victoria por 1-3.
La eliminación de Catar de su Copa del Mundo, tras menos de una semana de competición en un torneo para el que llevaba 12 años preparándose, se confirmó más tarde ayer con el empate 1-1 entre Holanda y Ecuador en el otro juego del Grupo A.
La de Catar es la peor actuación de un país anfitrión en los 92 años de historia del mayor torneo de selecciones del mundo.
Los campeones africanos, por su parte, se prendieron a la lucha por el pase a los octavos de final al acreditarse sus tres primeros puntos.
Holanda y Ecuador, con una derrota y un empate cada uno, encabezan el grupo con cuatro puntos.
El delantero Boulaye Dia rubricó el primer gol luego que el zaguero catarí Boualem Khoukhi quiso despejar un balón sin tener a un rival al acecho.
Khoukhi le pegó mal a la pelota y se cayó. Dia, jugador de la Salernitana de Italia, no perdonó con un remate de derecha para el 0-1.
Famara Diedhiou puso el 2-0 al inicio de la segunda parte al cabecear un cabezazo tras un tiro de esquina.
El suplente Catarí Mohammed Muntari le dio un hilo de esperanza a los de casa al definir de cabeza a los 78. Pero Senegal restableció la ventaja de dos goles seis minutos después mediante Bamba Dieng.
1 3
El español Félix Sánchez, seleccionador de Catar, ponderó el nivel mostrado por su equipo frente a Senegal a pesar de la derrota 1-3 al asegurar que demostraron “de lo que somos capaces” volviéndose “competitivos”. “Obviamente que el resultado es la clave, pero jugamos bien”, dijo en rueda de prensa.
Fue el primer triunfo de un seleccionado de África en este Mundial. Senegal juega sin su astro Sadio Mané, quien fue descartado por una lesión que sufrió jugando para el Bayern Múnich.
Qatar se suma a Sudáfrica como las únicas selecciones anfitrionas que han caído en la fase de grupos, aunque en 2010 los africanos cosecharon una victoria y un empate en sus tres encuentros.
Según las estimaciones, el emirato ha gastado alrededor de 220,000 millones de dólares en la organización del torneo, pero ha constatado que la riqueza no puede comprar un equipo de primer nivel.