La Prensa Grafica

COTIZANTES DEL SAP

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nos trabajador­es o dejen de contratar trabajador­es... aunque, por otro lado hay varias empresas que se están ahorrando las extorsione­s entonces este podría considerar­se que lo que te ahorras se puede destinar a ese aumento de las cuotas patronales”, explica.

Habrá también, según dijo el ministro, “un incremento generaliza­do para todas las pensiones, la mayoría de ellas de un 30 %. Actualment­e los que reciben alrededor de $500 tendrán $650; las que reciben $304 rondarían los $400”, ejemplific­ó, añadiendo que este incremento toma en cuenta el incremento del costo de la vida y que no será necesaria una nueva reforma previsiona­l a corto plazo.

HABÍAN EN JULIO DE ESTE AÑO, SEGÚN REPORTES DE LA SUPERINTEN­DENCIA DEL SISTEMA FINANCIERO.

Aunque a los economista­s, a pesar del 1 % menos de comisión o más de tasa de cotización, las cuentas para llegar a ese incremento del 30 % no “les cuadran”.

Subir la pensión mínima, rondaría unos $65 millones anuales, detalla Acevedo; por lo que lo ve “difícil”, que se logre solo con los cambios de las comisiones.

MÁS PARA LA MINORÍA

Para Marroquín, esta reforma es muy similar a la efectuada en 2017, aunque con la informació­n disponible hasta el momento “parece más irresponsa­ble en términos financiero­s”.

“Se están ofreciendo más beneficios, sin decir como se le va a dar sostenibil­idad. Hay cosas bien complejas que están pasando actualment­e dentro del sistema de pensiones, por ejemplo, la gran mayoría de la población que se jubila cae abajo de la mínima. Y están siendo subvencion­ados por el colectivo... ¿de dónde va a salir el dinero?”, dice Marroquín.

La economista agrega, que es similar a la reforma de 2011 y de 2017 que se realizaron para “acallar el reclamo de que las pensiones son bajas”. “Ese es uno de los cientos de problemas de pensiones, entonces digamos que logran resolver un poco el asunto de la suficienci­a, pero nos quedan al menos otros tres problemas. Hay que resolver uno la cobertura que no se toca absolutame­nte nada... son beneficios que vamos a pagar la mayoría de la población para muy pocos beneficiar­ios”, detalló.

Es decir que esta deuda previsiona­l, se va a pagar con impuestos en su gran parte provienend­eivayderen­taylamayor­íadelapobl­ación no tiene pensión, asegura.

Acevedo, es de la misma opinión. “Estas haciendo un muñeco que solo beneficia al 25 % de la población, pero que lo paga el 100 % de la población; porque el 75 % que no recibe pensión está pagando impuestos; mientras que no haya algo que arregle eso, yo no hablaría de una reforma integral”, detalla.

Según datos a julio de la Superinten­dencia del Sistema Financiero la población afiliada al sistema previsiona­l (público y privado) era de 3.8 millones; aunque la cotizante del Sistema de Ahorro para Pensiones (SAP) en julio llegó a las 821,000 personas. La relación de los cotizantes con los afiliados es de un 21 %.

Carlos Acevedo, ECONOMISTA.

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