VOLKSWAGEN T-ROC CABRIO: UN SUV PARA CONDUCIR A CIELO ABIERTO
EL PRIMER SUV DESCAPOTABLE DE LA MARCA ALEMANA LLEGA CON LO ÚLTIMO EN CONECTIVIDAD E INFOENTRETENIMIENTO, Y CON DOS MOTORES DE GASOLINA
El mundo de los SUV ha evolucionado tanto y tan rápido que cada día es más difícil hacer algo novedoso dentro del segmento. Sin embargo, si le preguntan a Volkswagen, tiene ahora mismo una respuesta: quitar el techo. Justo lo que el fabricante alemán acaba de hacer con el Volkswagen T-Roc Cabrio, el primer SUV descapotable de la marca.
Y sí, el lanzamiento de esta variante convertible se erige en un soplo de aire fresco para la gama, en sentido literal y figurado, al combinar el diseño de un deportivo de dos puertas estilo coupé con la estética de un todoterreno de cuatro plazas, cuya capota de lona —dicho sea de paso— solo tarda 9 s en replegarse.
Equipado con nuevos sistemas de asistencia y opciones de conectividad, el interior del T-Roc Cabrio es idéntico al del modelo original, aunque ofrece la posibilidad de personalizarlo con inserción de distintos colores.
Desde el punto de vista tecnológico, el modelo viene con lo último de infoentretenimiento de la plataforma modular MIB3, y permite al conductor conectar sus dispositivos al sistema nada más entrar en el vehículo, sin necesidad de cables, gracias al nuevo sistema AppConnect inalámbrico, además de acceder a una mayor cantidad de funciones dentro del ecosistema digital We de Volkswagen.
El T-Roc Cabrio verá la luz con dos niveles de equipamiento (Style y R-Line) que incluyen asistente de mantenimiento de carril, control de crucero adaptativo (ACC) con función Stop&Go (con DSG), función Pre-Crash, climatizador bizona, sistema de navegación avanzado y retrovisores abatibles eléctricamente.
Mientras, su dotación mecánica consta de dos motores de gasolina: 1.0 TSI de 115 CV (solo para el acabado Style) y 1.5 TSI de 150 CV. Acoplado a una transmisión manual de seis velocidades, el primero alcanza velocidad tope de 186 km/h con un consumo medio homologado de 6,3 L/100 km, a la par que la mecánica de mayor potencia puede montar opcionalmente una transmisión de doble embrague DSG de siete velocidades, con una velocidad máxima de 205 km/h y 6,8 L/100 km en el gasto promedio de combustible.