¡SACRIFICIO!
Entrega Centenares de católicos rememoran la pasión y muerte de Jesucristo y transitan con él a la Vía Dolorosa. La Iglesia invitó a sus fieles a ser misericordiosos y ver el rostro de Jesús en los que sufren.
“Necesitamos encontrarnos con Jesús en cada persona que sufre, necesitamos caminar con Jesús para volver al Padre”, pidió ayer el padre Juan Carlos Martínez, párroco de la Catedral San Miguel Arcángel, durante la celebración del Vía Crucis, que no tuvo la presencia del cardenal Óscar Andrés Rodríguez. Desde tempranas horas de la mañana, centenares de católicos rememoraron la Pasión y Muerte de Jesucristo, siguiendo paso a paso las 15 estaciones que retratan los momentos que el Hijo de Dios recorrió en su camino al Calvario.
Cuadros vivientes dramatizaron cada escena que recogen las Sagradas Escrituras y caminaron desde el Parque Valle hasta la iglesia El Calvario de Tegucigalpa.
Encuentro
Previo al inicio del Vía Crucis, el padre Martínez elevó una plegaria a Dios para que permitiera a los presentes experimentar durante el recorrido “el sufrimiento, el dolor, la injusticia, la necesidad que tenemos de comprometernos con nuestra sociedad, con nuestro mundo y con nuestras familias”. En cada estación, el sacerdote, junto con el padre Luis Enrique Gutiérrez, hizo un llamado a los hondureños a ser misericordiosos, a encontrar a Jesús en el rostro de los que sufren, a “construir cada día un mundo mejor, una Honduras mejor, más justa, más fraterna, llena de Dios”. El presbítero reflexionó que “necesitamos encontrarnos con Jesús en cada persona que
sufre, necesitamos caminar con Jesús para volver al Padre, necesitamos descubrirlo a cada momento, cargando con su cruz el camino del calvario, el enorme calvario del mundo en el que todos vamos con el peso de nuestra propia cruz”,
Explicó que “descubrir el lenguaje de la cruz es descubrir también que muchos de nuestros caminos no van por el de Jesucristo, quien a pesar de su derrota es el camino de vida”. “Jesús no inventó la cruz, se la impusimos nosotros, le salimos con ella a su paso y seguimos saliendo al paso de nuestro hermano para obligarle a cargar el peso del sufrimiento, continuamos sin respeto ni aprecio suficiente a la vida”, lamentó. El párroco de la Catedral recordó que Jesús dijo: “Mi mandamiento es este: que se amen los unos a los otros como yo los he amado, sean amigos, como yo he sido amigo de ustedes, no hay amor más grande que dar la vida por los amigos”