Invitado “Panamá Papers” y la nueva era de intercambio de información
parte del país requirente, por lo que solamente se obtiene información de casos que ya están en el radar de los gobiernos.
Estados Unidos fue de los primeros en percatarse de que este tipo de instrumentos no iban a ser suficientes y como resultado de la crisis financiera del 2008 promulgó en el 2010 el Foreign Account Tax Compliance Act (FATCA). Esta ley le exige a todas las entidades financieras del mundo que a partir del 2014 identifiquen cuáles de sus clientes son contribuyentes estadounidenses y los reporten de forma automática y anual al Internal Revenue Service (IRS).
Posteriormente, Reino Unido secundó este instrumento y emitió una normativa similar conocida cono UK CD-OT para las entidades financieras que operaran en sus territorios de ultramar.
Ambas contribuyeron en gran parte a la red global que hoy la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) quiere implementar: El Estándar Común de Reporte (CRS). Este acuerdo macro es un punto de partida para crear una red que permita el intercambio automático de información entre varios países, información que será captada por las entidades financieras de todo el mundo a partir del 1 de enero del 2016. En la región, Costa Rica y Belice ya forman parte del CRS y se prevé que en el corto plazo se unan el resto de los países.
Si el CRS llegara a implementarse en su totalidad, los “Panamá Papers” serán poca cosa. Imagínese a más de 96 países compartiendo anualmente información sobre las operaciones financieras realizadas dentro de su territorio; a Costa Rica, Islas Caimán, Belice, Islas Vírgenes Británicas y Suiza (todos parte del CRS) revelando con nombres y apellidos cuentas e inversiones alérgicas a la luz.
Llama la atención que Panamá había manifestado su disposición de continuar con el intercambio de información de relevancia tributaria únicamente de manera bilateral, razón por la cual la OCDE decidió excluirla de la lista de países que cumplirían con la red global. Sin embargo, el 14 de abril (unos pocos días luego de las publicaciones) este país modifica su postura y confirma su disposición para implementar el intercambio de información de forma consistente con los objetivos del CRS.
Lo que demuestra este abrupto cambio en la política de Panamá es el peso que tiene esta nueva tendencia a nivel global y su inminente implementación. El futuro exige transparencia y cooperación, tanto de las administraciones tributarias del mundo como de los contribuyentes; pero sobre todo demanda un sistema de intercambio de información eficiente. Ciertamente estamos ante el inicio de una nueva era
Luz Ernestina Mejia P.
Usualmente los países negocian acuerdos para el intercambio de información tributaria como mecanismos para recibir datos de relevancia fiscal”.
“El futuro exige transparencia y cooperación (...), pero sobre todo demanda un sistema de intercambio de información eficiente”.