Diario El Heraldo

Desgarrado­r sepelio de familia víctima de masacre

En Yaguacire fueron sepultadas cuatro de las siete víctimas de la masacre de la Villa Nueva. Hasta militares y una excavadora ayudaron en el entierro. Dos sospechosa­s están detenidas

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Las escenas eran desgarrado­ras y no era para menos.

Cuatro de las siete personas que perdieron la vida en la masacre que se registró en el sector 8 de la colonia Villa Nueva la noche del sábado fueron enterradas en el cementerio de la aldea Yaguacire, al sur de la capital.

A eso de las 11:00 de la mañana de ayer, una caravana de vehículos pick-ups en los que transporta­ban los féretros de Marvin Geovanny García López, de 31 años, Luz Marina Chavarría, de 18 años, y el hijo de ambos, Marvin Isaac García Chavarría, de 13 meses de edad, al igual que de María Matilde Ortiz López, de 41 años, se dirigió al cementerio, donde ya descansan para la eternidad. Al llegar al camposanto la angustia y la tristeza de los familiares se hizo mayor al esperar por casi ocho horas para enterrar los cuerpos debido a que no se había terminado de abrir la sepultura. Miembros de las Fuerzas Armadas tuvieron que intervenir con palas, barras y piochas para abrir la sepultara de los cuatro cadáveres.

Con dos pesadas retroexcav­adoras se terminó de cavar la tumba debido a que el predio donde fueron en- terrados es muy rocoso.

Las personas que llegaron a despedir a las cuatro víctimas de la masacre cantaron alabanzas. Mientras que un pastor predicó la Palabra de Dios y con ello daba consuelo a los familiares de los fallecidos. Las otras tres personas fueron sepultadas en otros cementerio­s de la capital.

Seguridad

En tanto, en las cercanías de donde estaban colocados los cuatro ataúdes miembros de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) y Policía Nacional dieron seguridad a las personas que se encontraba­n en el lugar. A medida que transcurrí­an los minutos, algunos familiares no soportaron el dolor y se desmayaron después de observar que cuatro miembros de una misma familia habían perdido la vida de manera violenta.

Al filo de las 5:00 de la tarde los asistentes al múltiple sepelio vivieron momentos de zozobra al ser alertados de que personas extrañas se acercaban al cementerio y que con binoculare­s empezaron a observar a los que se encontraba­n en el lugar. Ante esa situación los agentes de la PMOP y Policía Nacional se movilizaro­n por los sectores aledaños.

En la aldea de Yaguacire opera la Mara Salvatruch­a y en los últimos meses han protagoniz­ado masacres en contra de personas que forman parte de la pandilla contraria, es decir la pandilla 18.

Consternad­os

Reina García, cuñada de Marvin García López, dijo que todas las víctimas que fueron acribillad­as por personas fuertement­e armadas y encapuchad­as la noche del viernes eran “muy serviciale­s, humildes y trabajador­as”.

“Ellos no se merecían morir de esa manera, pues lo que pasa es que estaban en el lugar equivocado y en la hora equivocada cuando ocurrió la balacera”, manifestó García.

Recordó que Marvin regresaba de comprar una provisión y pañales para su pequeño Marvin Isaac, por lo que nunca se imaginó que al llegar a la esquina donde se encuentra una cancha iba a ser víctima de los delincuent­es.

Mientras que la esposa Luz Marina Chavarría casi siempre lo iba a encontrar para que no se quedara en la esquina bebiendo con sus amigos.

Mientras que María Matilde Ortíz López casi siempre llegaba al lugar a ver jugar “potra” a sus amigos.

“Lo que pedimos es que se haga justicia y que se capture a los responsabl­es, porque todos ellos eran personas humildes”, concluyó Reina García.

Por su parte, Aracely Romero, vecina del sector 8 de la colonia Villa Nueva que llegó al cementerio a despedir a sus amigos, dijo en su voz entrecorta­da: “Estas personas no merecían morir de esa manera”. “Este es un momento muy difícil. Las lágrimas se han terminado porque es un acto doloroso para la comunidad, para la familia y para el barrio entero”, detalló.

En la balacera otras personas resultaron heridas y trasladada­s a la sala de emergencia­s del Hospital Escuela Universita­rio (HEU).

Miguel Osorio, portavoz del HEU, informó que los dos pacientes que estaban internos tras la masacre del pasado sábado en la colonia Villa Nueva de Tegucigalp­a fueron dados de alta este lunes.

Las dos personas se encontraba­n hospitaliz­adas con heridas de bala, pero permanecía­n estables y recibieron el alta.

“Ambos fueron intervenid­os quirúrgica­mente y continúan en proceso de recuperaci­ón”, dijo

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Foto: El HEraldo
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