InvItada UNAH: 60 años de autonomía universitaria
autogobierno, autogestión, potestad para emitir y formular sus propios estatutos y programas de estudio. También favorece la agrupación estudiantil para entablar con la autoridad relaciones de mutuo interés pedagógico, de seguridad, y cumplimiento de planes y programas culturales de desarrollo.
Los movimientos estudiantiles y sus luchas han estado presentes en la vida universitaria casi desde sus inicios. Fue precisamente gracias al movimiento estudiantil protagonizado por la Federación de Estudiantes Universitarios de Honduras (FEUH) que la universidad obtuvo del gobierno militar (integrado por el general de Infantería Roque Jacinto Rodríguez Herrera, el coronel de aviación Héctor Caraccioli Moncada y el mayor Roberto Gálvez Barnes) la aprobación de su Ley Orgánica y autonomía, mediante el Decreto No. 170 del 15 de octubre de 1957. A partir de ese momento, pasó a llamarse Universidad Nacional Autónoma de Honduras. Y mediante Decreto 209-2004 el Congreso Nacional aprobó una nueva Ley Orgánica, sustituyendo la anterior, que estuvo vigente hasta el 11 de febrero de 2005.
Aunque la autonomía de la UNAH ha sido muchas veces violentada por la Policía y los militares en su afán de brindar orden y seguridad; por los estudiantes al ser partícipes y protagonistas de actos delincuenciales dentro de las instalaciones de la universidad, y las mismas autoridades universitarias al no tomar acciones rápidas, eficaces y oportunas. Entonces, si gracias a la lucha estudiantil se logró la autonomía universitaria, ¿por qué ahora estos supuestos estudiantes están pidiendo a gritos, palos y piedras que se violente una vez más la autonomía al pedir al Congreso Nacional que nombre una junta interventora para solucionar el actual conflicto?, ¿están mal asesorados o es que desconocen el real significado de la palabra autonomía? En la universidad no debe haber desconcierto ni confusión, debemos desechar prejuicios e ideas desfasadas, pasadas de moda que ningún bien hacen.
Recordemos y tengamos presente que, al salir de las aulas universitarias, si es que llegan a alcanzar la meta, qué clase de profesionales serán estos estudiantes que hoy gritan, golpean, hieren e insultan. Si ellos son los que tiene en sus manos el destino de la sociedad, del país, la nación entera corre un gran peligro. ¿Qué clase de líderes pueden ser?, como legisladores, qué tipo de gobierno tendremos si no tienen método, cordura, sabiduría y paciencia. Ya basta de tanta violencia, ¿por qué destruir las instalaciones que son para su propio beneficio y el de la sociedad?
La autonomía de la UNAH ha sido muchas veces violentada por la Policía y los militares (...) por los estudiantes (...) y las mismas autoridades universitarias”.