Sin fondos siguen operando los centros de formación docente Hasta un año más podría tardar transición de centros
Acuerdo de transformación de las normales establece que el 31 de diciembre de 2017 concluye el período de transición a los nuevos centros de profesionalización de maestros
Cuando se anunció que las escuelas normales del país iban a desaparecer, nació la promesa de que en su lugar se crearían centros para la especialización de todos los docentes en servicio en el sistema educativo. Y pese a los esfuerzos de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), las seis escuelas normales que quedaron bajo su cargo no tendrán el rendimiento óptimo por falta de recursos.
De las 13 escuelas que hay en Honduras, seis quedaron bajo su manejo, pero hasta el momento los recursos que debían haberse desembolsado, están pendientes.
Se trata de la Escuela Normal Justicia y Libertad de Gracias, Lempira; Escuela Normal España de Villa Ahumada de Danlí, El Paraíso; Escuela Normal Mixta del Sur, Choluteca; Escuela Normal Mixta de Occidente, La Esperanza, Intibucá; Escuela Normal de Santa Bárbara y la Escuela Normal Mixta de Olancho.
El director de Formación Inicial Docente de la UPNFM, Hernán Montúfar, manifestó que hasta el momento no se han hecho efectivos los fondos para el manejo de los centros de formación inicial. El proceso de transición de las escuelas normales del país podría extenderse un año más, según estimaciones de las autoridades de la Comisión Presidencial de la Calidad Educativa. Marcial Solís, presidente del organismo, explicó que el plazo para la transformación de las normales vence el 31 de diciembre próximo, pero debido a la falta de presupuesto este período podría extenderse. Detalló que se debe contratar docentes, realizar obras de infraestructura y comprar equipos para garantizar el completo funcionamiento de estos centros. Se estima que se requieren alrededor de 500 millones de lempiras para llevar a cabo el proceso de transformación de las escuelas normales del país
“Se redujo el presupuesto, nos depositaron 18.6 millones en Banadesa, pero desgraciadamente y por la burocracia que se da no nos han hecho ningún desembolso”, lamentó el académico.
Esto pone en riesgo el funcionamiento de los centros, los cuales actualmente atienden a una población de más de 2,000 estudiantes que saldrán con una licenciatura en educación.
Para manejar las instituciones se han creado convenios con otras organizaciones, usado fondos del presupuesto de la UPNFM y hasta se han realizado préstamos.
“Hemos estado con nues- tros recursos, sacando préstamos para poder sostener la transformación y la formación docente”, lamentó Montúfar. Explicó que el desembolso de esos recursos debe hacerse a la mayor brevedad ya que las actividades continúan desarrollándose y la UPNFM no podrá sostenerlas sin las condiciones necesarias.
Para el caso, hace falta contratar más docentes, pero sin fondos la situación se vuelve complicada para la institución educativa.
Secretaría de Educación
Los centros que quedaron bajo el cargo de la Secretaría de Educación no pasan una situación distinta a los de la UPNFM, pues de los 500 millones que necesitan para echar a andar los centros de formación, no han recibido nada. Ese presupuesto debe ser aprobado por el Congreso Nacional y hasta el momento ni siquiera se ha discutido.
Actualmente, los centros no están funcionando en su totalidad ya que falta hacer informes sobre las áreas en las que serán orientados los maestros. Los últimos meses hubo una reubicación de maestros, algunos fueron jubilados y otros colocados en áreas administrativas.
El acuerdo que contempla la transformación de las escuelas normales aprobado por el Poder Ejecutivo establece que a más tardar el 31 de diciembre de 2017 se debe extender la transición que permita el óptimo funcionamiento de estos centros.
Establece que la Secretaría de Educación, Finanzas y la universidad vinculada deben establecer una comisión para que se encargue de priorizar los recursos necesarios para llevar a cabo la transformación de estos centros.
Indica que se deben buscar tanto fuentes nacionales como externas para el financiamiento de las mismas