FMI y su visión de los avances y retos
En su último examen de las políticas macroeconómicas del país, el FMI destacó una vez más los avances del programa de estabilización que comenzó en 2014. “La economía hondureña continúa comportándose de manera satisfactoria”, señaló el organismo internacional que, no obstante, proyecta para 2018 un crecimiento del PIB (de 3.7%) menor al de 2017 (4.8%) debido “a la incertidumbre política y condiciones externas menos favorables”.
También, debido a un ligero exceso de la demanda y a precios del petróleo más altos, se espera que la inflación se mantenga por encima del 0.5% de la banda de tolerancia del Banco Central.
Asegurar la solidez financiera de la ENEE, fomentar la creación de empleo, reducir la pobreza con medidas que incluyan una mayor eficiencia del gasto social son algunas de las recomendaciones que nuevamente hace el organismo de crédito. Pero la novedad en este informe preliminar del FMI es que incluye el tema de la corrupción y lavado de activos, algo que no ha pasado inadvertido en un país que ha retrocedido en los últimos dos años en el Índice de Percepción de Corrupción (IPC).
Así, recomienda “Continuar con los esfuerzos de lucha contra la corrupción para fortalecer el Estado de derecho como un elemento clave para generar inversión” y considera como “fundamental profundizar los avances en la lucha contra la corrupción, incluido el aumento de la judicialización de casos por la vía penal”. Además, “mejorar la transparencia del actual régimen de declaración jurada de activos de funcionarios públicos, y aumentar los recursos y efectividad de las agencias a cargo de la lucha contra la corrupción, el lavado de dinero y el combate al financiamiento del terrorismo”.
En esa misma línea, plantea que “Reducir las exoneraciones fiscales y fortalecer los esfuerzos de la administración tributaria deberían ir en paralelo con la optimización de la masa salarial y el aumento en la transparencia y la eficiencia del gasto social”. Y “Mejorar la transparencia del gasto público ejecutado a través de fideicomisos también sería un paso importante para proporcionar una mayor rendición de cuentas en el uso de los recursos públicos”. Ni más ni menos, lo que ha venido exigiendo la sociedad hondureña