Juega con el 4-4-2, pero se adapta a las características de sus jugadores
Con las selecciones juveniles de Uruguay, el ahora DT de la H mostró dos caras: un equipo con tenencia y otro contragolpeador. “Sabe cómo plantear partidos para defenderse y para ofender”, explicó el periodista Pablo Benítez
Si hay algo que ha evidenciado Fabián Coito durante su carrera de entrenador es que su estilo de juego depende de las características de sus futbolistas. No se amarra con ninguna idea.
“Es un técnico bastante versátil, que se puede adaptar a las características de los jugadores que le toque dirigir”. Desde Uruguay lo describe el periodista deportivo de Diario El Observador de Uruguay. Su idea de juego se aferra a la “verticalidad y profundidad”, según el portal La Pizarra del DT. Pero esa idea cambia de acuerdo a sus piezas.
Durante su carrera en las selecciones juveniles de Uruguay, Coito ha armado equipos con tenencia y otros más verticales.
Coito con las inferiores de Uruguay mostraría una filosofía que “se basaría en construir un bloque compacto, donde los volantes por fuera bajarían a colaborar con los laterales, que generaría peligro en campo contrario con un fútbol directo, en el que dependería de los jugadores, pero tendrían poco tiempo con el balón”.
Con tenencia de pelota
Con la Sub 20 de 2015 se convirtió en un equipo agresivo en el mundial disputado en casa, mientras que con la 20 de 2017 practicó un fútbol de tenencia de pelota en la que destacaban jugadores de buen pie como Rodrigo Bentancur.
“Coito dibujaría en el campo un 4-4-2 en ciertos momentos, sin embargo, con el sistema que más saldría en su puesta en escena sería el 4-1-4-1, con dos volantes por fuera con recorrido ida y vuelta para colaborar en defensa con su lateral”, explicó la Pizarra del DT.
Este era, según Benítez, “un equipo con tenencia y con características que tampoco son tradicionales del fútbol uruguayo”.
En esta idea, la figura del volante por fuera sería clave, no solo por el retroceso, sino porque también aportaría juego entre líneas para deeste jarle la banda al lateral.
Acentuó el 4-4-2
En la última experiencia con la Sub 20, que logró al boleto al Mundial en este 2019, el DT plasmaría una idea parecida a la de 2015, en la que la intención era recuperar y salir rápido al ataque. El equipo charrúa tocaba poco y se ponía en campo contrario con pocos pases.
Aquí, el entrenador pondría “un 4-4-2 con intercambio de zonas entre los dos delanteros de arriba, para que uno saliera a pelear la pelota y el otro atacante recibiera al espacio o al pie el balón”.
Este equipo tenía poco tiempo la número cinco. En estilo, los volantes externos eran más encaradores, aparecían constantemente los desdobles y había volantes más lanzadores.
“El equipo fue distinto, más pragmático, más estratégico, más de analizar a los rivales, minimizarlos para luego ofenderlos, porque tampoco tenía las características con volantes centrales con gran manejo”, explicó Benítez.
Sin duda, gusta por jugar con un compacto 4-4-2, pero no está matriculado con ningún sistema de juego.
“Trabaja mucho en campo y es muy inteligente como estratega, sabe cómo plantear partidos para defenderse y cómo plantear los partidos como para ofender. Tiene todo para triunfar a nivel mayor”, sentenció Benítez...
Según varios periodistas uruguayos, el exdefensa de Olimpia tiene la preparación necesaria para hacer funcionar bien a la H. ¿Jugará con el plan de la tenencia o apostará por la estrategia de la verticalidad?