Glenn Close y su sexto intento por la estatuilla
La múltiple nominada al Oscar conversa sobre la cinta The Wife, donde da vida a Joan, una mujer que durante décadas ha sido la esposa perfecta para un escritor tan talentoso como inmaduro y egocéntrico
Aunque en cuarenta años de carrera Glenn Close ha estado nominada siete veces al Oscar, nunca ha ganado la estatuilla a Mejor actriz, algo que podría cambiar en la próxima ceremonia de entrega de premios de la Academia de Hollywood gracias a su interpretación en The Wife. Las críticas que ha recibido la película han sido estupendas, y The Guardian, sin guardarse halagos, sentenció que esta era la mejor actuación de la actriz en su vida, un performance brillante que encantará a su fans y que hará que quienes no lo sean se vuelvan sus admiradores de inmediato.
Previo a los Oscar que se entregan en la ciudad de Los Ángeles, este 24 de febrero, y donde Close está nominada, conversa sobre que representa este papel para su carrera.
¿Qué te atrajo de esta película?
La historia. La encontré muy desafiante y me acerqué a ella con muchas preguntas que supe que tendría que responder para interpretar al personaje en forma verdadera. La más importante fue por qué ella simplemente no deja a su marido. A final de cuentas, es la historia de una relación muy complicada. Trabajé muy duro para hacer su vida creíble: su viaje emocional, su despertar; el hecho de que fuera posible que se convirtiera en una mujer independiente y que no viviera a través de su marido.
Cuando leíste el guión, ¿reconociste al personaje? ¿Conoces mujeres que han estado en una situación similar?
¡Oh, Dios mío!, creo que hay generaciones de mujeres en esa situación; mi madre, mi abuela….
¿Tú, que has tenido una carrera tan espectacular, has estado alguna vez en una situación que te exija poner tus propias aspiraciones en segundo plano? Ja, ja, ja… No voy a hablar de eso. Es mi secreto. Puedes sacar tus propias conclusiones.
¿Y sentiste alguna vez que alguien estaba poniendo sus aspiraciones de lado para dejarte avanzar?
Las relaciones entre personas creativas exigen siempre una maniobra muy delicada, porque en general la creatividad toma mucho espacio emocional. Uno debe tener una pareja que sea increíblemente comprensiva, es algo que corre para ambos lados.
¿Ves alguna relación entre este personaje y otros que has interpretado en el pasado?
Creo que todos están relacionados de alguna manera. En general, se podría decir que muchos de mis personajes son mujeres que tratan de entender cómo existir en un mundo dominado por hombres. Uno puede decir eso de la marquesa de Merteuil en “Relaciones peligrosas”, por supuesto.
¿Alex Forrester en
“Atracción fatal”? Su caso es diferente, porque es una mujer con trastornos que no tiene las herramientas necesarias para satisfacer su vida sin el hombre que le interesa. En el caso de The Wife se trata de una mujer que ha
creado una relación en tiempos prefeministas; en cierto modo ha sido elegida para su rol, pero por otro lado también lo ha elegido. No ha tenido opción. Pertenece a una generación que no sabía que podía llevar adelante una
vida satisfactoria sin estar a la sombra de un hombre.
Esta película se estrena en un momento especialmente importante para las mujeres, cuando se habla de empoderamiento, de la relación entre los géneros. ¿Eres optimista respecto a la situación actual? Sí. Creo que va a ser difícil, pero no creo que volvamos donde estábamos antes. Puede que haya una reacción en contra, pero lo que ha sucedido en nuestra cultura es tan profundo y ha ocurrido en un momento tan irónico, particularmente en Estados Unidos, que me parece imposible que las cosas vuelvan a su estado anterior. Eso me da mucha esperanza, es una evolución cultural sumamente importante.
¿Por qué tomó tanto tiempo?
¡Porque es algo que ha estado ocurriendo durante siglos! Me estoy preparando para un personaje en una
obra que transcurre en los tiempos medievales, cuando las mujeres eran consideradas malvadas y sucias. Cuando estaba investigando mi personaje en “Albert Nobbs” vi documentos de la reina Victoria donde se establecía que las mujeres que luchaban por sus derechos debían ser azotadas. Ha sido un largo camino, porque esa es la naturaleza de nuestra especie. Tradicionalmente se ha pensado en el hombre como el que sale a buscar la comida, el que pelea en las guerras para proteger a su familia, el que genera el sustento, pero hay tantos otros elementos en nuestra cultura actual: la población ha crecido, la economía se ha hecho más compleja… Quiero pensar en esto como en una revolución cultural positiva que haga a la gente más feliz, satisfecha y creativa