Empresarios, hablen fuerte y claro
Muy tímidos se vieron los empresarios el pasado jueves en una conferencia de prensa desde su sede en Tegucigalpa. Este es el momento de hablar de forma fuerte y clara. Honduras reclama que se exija al Sr. fiscal general de la República que cumpla con su deber, luego de las declaraciones que se dieron en la Corte de Nueva York. Él está obligado a actuar de acuerdo a la responsabilidad de su cargo, de igual forma sus subalternos, pues si no caen en contubernio con los que fueron mencionados y eso constituye una falta grave para un funcionario público que se debe exclusivamente a defender los intereses de la sociedad hondureña. De igual forma se debe exigir al presidente del Poder Judicial mano firme y cero tolerancia, ¿o acaso este cargo se ostenta para proteger políticos? El país fue exhibido y quedó en evidencia que el sistema está corrupto en todos sus niveles, por consiguiente, este no debe verse como un problema sino como la oportunidad que se presenta para depurar las instituciones comenzando con el Partido Nacional que ostenta el poder, una institución política que por su naturaleza y razón de ser, sumado a su longevidad, no es justo que está siendo utilizada para “defender lo indefendible”. Nuestra democracia se tambalea en la medida en que la gente de nuestro país pierda confianza en sus líderes y el mundo nos vea como un narcoestado. El calificativo es más grave de lo que parece, nuestro país no fue condenado legalmente, pero sí lo fue moralmente. Cuando los políticos fracasan, fracasamos todos. El sector privado es el que se ve más afectado y debe alzar su voz con energía, incluso debe exigir también a los medios de comunicación: objetividad e independencia a la hora de informar pues una prensa corrupta también es dañina para nuestro presente y para las nuevas generaciones. Medio que se parcialice de forma descarada para un lado u otro, que no paute publicidad la empresa privada en ellos y punto.