Crece la indignación en EE UU por crimen contra George Floyd
Reacción Las manifestaciones han ocasionado indignación y anarquía entre los manifestantes, quienes afirman que la acción del policía fue un crimen racial
Diversas protestas se extienden por Estados Unidos desde que un crimen ocurrido el pasado 25 de mayo enardeció a millones de personas alrededor del mundo. Se trata del fallecimiento de George Floyd, un afroamericano que murió tras ser asfixiado por un policía de Minneapolis, Minnesota. El uniformado mantuvo durante más de 10 minutos su rodilla sobre el cuello del hombre que ya había sido sometido y que lejos de oponer resistencia para ser capturado pedía desesperadamente que lo dejara respirar. Todo quedó captado en videos y la captura sucedió presuntamente porque Floyd intentó realizar una compra con un billete falso de 20 dólares.
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Calles llenas de manifestantes, negocios saqueados, infraestructura destruida, y enfrentamientos entre protestantes y policías son parte de los escenarios que se viven desde hace cinco días en algunas ciudades estadounidenses, donde “¡Déjame respirar!” ha sido la consigna común, en honor a las últimas palabras pronunciadas por George Floyd. Mil uniformados de la Guardia Nacional fueron movilizados ayer ante el estallido de las violentas protestas. El estado de Los Ángeles decretó estado de emergencia para detener las manifestaciones y el presidente Donald Trump dijo que “no podemos ni debemos permitir que un pequeño grupo de criminales y vándalos destruyan nuestras ciudades y causen devastación en nuestras comunidades”, aseguró tras las revueltas de la noche anterior en la ciudad de Minneapolis. “Mi administración detendrá la violencia de la turba. Y la detendremos en seco”, añadió. Ante las presiones de la población, las autoridades de Minneapolis informaron que el oficial, quien fue identificado como Derek Chauvin, y otros tres compañeros que participaron en el arresto habían sido despedidos y que Chauvin enfrenta un proceso judicial por asesinato en tercer grado, además que sus colegas también enfrentarán cargos similares, pero la ira de las personas no cesa, ya que aseguran que los crímenes raciales no se detienen
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