EE UU prueba vacuna contra virus en 30 mil voluntarios
Tercer fase La vacuna se encuentra en la última fase de prueba clínica
El más ambicioso proyecto para hallar una vacuna contra el coronavirus comenzó ayer con la presencia de 30,000 voluntarios dispuestos a recibir la dosis elaborada por laboratorios del gobierno estadounidense. No hay garantía alguna de que la vacuna experimental, desarrollada por los Institutos Nacionales de Salud y Moderna Inc., funcionará adecuadamente, pero sin duda representa una de las mayores esperanzas para la comunidad científica y la humanidad.
¿En qué consiste?
El laboratorio a cargo de la vacuna creó el prototipo a partir de una pequeña muestra del virus. Los voluntarios reciben una inyección con el fragmento, el cual es incapaz de producirles la enfermedad o cau- sar síntomas asociados a ella, según los expertos. Lo que pretende es lograr que el sistema inmunológico reconozca al virus y con ello desarrolle anticuerpos ante posibles contagios. Para determinar la eficacia de la dosis, los voluntarios no sabrán si están recibiendo la vacuna o un placebo. Luego de dos inyecciones, serán monitoreados de cerca para ver cuál de los dos grupos desarrolla más infecciones al tiempo que prosigue con su rutina diaria. Moderna informó que las vacunaciones fueron realizadas en Savannah, Georgia, el primero de más de 90 sitios en que se realizará el experimento. Actualmente hay otras vacunas que también están en la fase 3 del proceso de pruebas, laboratorios como el de la Universidad de Oxford en alianza con Astrazeneca, en Reino Unido, y el Sinovac Biotech, en China, también realizan pruebas en humanos, sin embargo, Moderna, a pesar de haber sido la última en entrar a esa etapa, es la que más voluntarios tiene hasta el momento. El mundo entero urge de una vacuna efectiva contra el enemigo invisible y aunque en el proceso miles de personas continúan perdiendo la vida a causa de la enfermedad, los estudios sirven no sólo para ver si la vacuna funciona, sino también para garantizar que no tengan efectos secundarios perniciosos, aseguran los expertos, quienes proyectan que a mediados de 2021 podría haber un antídoto oficial que pueda ser distribuido