Imborrable legado de Morazán para las nuevas generaciones
Gesta Es considerado el fundador de la patria grande por la que luchó, murió y dejó un legado invaluable en los campos de la educación, el derecho, la religión y el civismo
A un año del bicentenario de la independencia patria, los principales legados que dejó Morazán se están cumpliendo en los campos de la educación, el derecho, la religión y el civismo.
La unidad centroamericana, si aún no se ha concretado el sueño del prócer de tener una sola patria, por lo menos hay iniciativas de integración como la unión aduanera, el sistema de integración, la Corte Centroamericana de Justicia y el Parlamento Centroamericano (Parlacen).
Varios fueron los intentos por reunificar la Federación Centroamericana, pero los proyectos tuvieron en los grupos oscurantistas de la región a sus principales enemigos apoyados por otros países como Inglaterra y Estados Unidos.
Medidas y legado
El líder unionista hizo cosas imborrables para la historia. Como presidente de la Federación que ejerció entre 1830 y 1838, y a pesar de los constantes hostigamientos de sus enemigos, impulsó una serie de medidas en lo político, educación, religión, en lo económico y en lo cívico. “En términos generales pienso que el legado del general Morazán es invaluable, ha llegado a tantas esferas de la sociedad”, dijo consultado por EL HERALDO el historiador y profesor universitario Jorge Amaya.
“En lo político su principal legado es lo que hoy se denomina las garantías individuales, es decir, que todo ciudadano tiene derecho a la vida, a la libertad, a la igualdad, a la libertad de conciencia, al derecho a elegir y a ser electo”, añadió.
El héroe y mártir impuso como presidente “la idea liberal de que el poder emana del soberano, que el Estado se constituye a partir de la voluntad y decisión del soberano”. El sistema de gobierno republicano con sus tres poderes es obra del ilustre patricio. En la parte educativa, Morazán “nos legó la práctica de que la educación de un estado debe ser laica y gratuita, financiada por el Estado”.
“También nos heredó la idea de la libertad de religión, la libertad de cultos; la idea de (que) cada ciudadano puede elegir la religión que más le plazca”, resaltó Amaya.
Durante su gobierno, el legendario hombre abordó también la parte económica. Llegó a la conclusión de que en un estado de derecho debe prevalecer el respeto a la propiedad privada.
“En lo cívico nos dejó dos importantes legados: la idea del unionismo en Centroamérica, una sola patria y la idea del republicanismo como forma de gobierno”, dijo Amaya.
Otro académico, Miguel Ángel Cabrera, quien imparte la cátedra morazánica en la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), declaró que el estadista no solo fue una figura de Centroamérica, sino de Latinoamérica.
“Uno de sus sueños fue tener una misma bandera, unas mismas leyes, soñó que Centroamérica tuviera un canal interoceánico” y este último se concretó primero con el Canal de Panamá y más recientemente hay iniciativas de Nicaragua para tener una vía a través del río San Juan.
Morazán, ilustrado desde muy joven con las ideas de los grandes enciclopedistas franceses, quiso hacer de Centroamérica una región próspera, consolidada, unida.
En el campo del derecho sentó las bases de las leyes que hoy, doscientos años después, rigen las relaciones del Estado con la sociedad. Promovió los juicios por jurado y el habeas corpus.
“Morazán es el primero que trae a Centroamérica el Código Livingston que tiene en su interior todas las leyes que se conocen como el hurto, el robo, la lujuria, la corrupción”, recordó Cabrera. Prohibió la pena de muerte.
Consideró que las parejas en un hogar debían estar legalizadas por el matrimonio; pero también implementó el divorcio. Y fue más allá: la gente que moría no podía ser enterrada en cualquier lado y para eso “legalizó los cementerios oficiales”.
Iglesia y Estado
Este egregio paladín sabía que la Iglesia no podía seguir metiéndose en los asuntos públicos como la educación y la religión.
Y aunque se ganó la enemistad del clero separó al Estado de la Iglesia, impulsó la libertad de cultos, la educación la declaró laica y reguló que los diezmos fueran opcionales.
“Esto se ha cumplido (a la fecha) y si a veces (las iglesias católica y evangélica) interceden en alguna problemática es porque los políticos las buscan”, dijo el catedrático morazanista.
Morazán se preocupó por tener relaciones diplomáticas con otros países, especialmente Estados Unidos y Gran Bretaña.
El ejercicio periodístico le debe a Morazán las bases de la libertad de prensa, de expresión y de pensamiento. En el caso de Honduras trajo en 1830 la primera imprenta, donde se editó La Gaceta como periódico oficial.
Audacia, talento y magnanimidad
El fundador de la patria grande demostrótalento, valentía, audacia y
magnanimidad en los escenarios de guerra. Ganó más de veinte batallas,casi siempre con un número menor de hombres en relación con el que tenían sus enemigos.
Exhibió un trato magnánimo con sus enemigos cuando caían en sus manos. Solo los desarmaba, los instruía sobre la causa por la cual él luchaba y les daba dinero para que se fueran a sus casas.
Hasta al mismo sanguinario y acérrimo enemigo, Rafael Carrera, lo dejó ir después de haberlo vencido en varios combates.
Morazán era un hombre distinto. “Suprimid el genio de Morazán y habéis aniquilado el alma de la historia de Centroamérica”, dijo el intelectual periodista hondureño Álvaro Contreras