Miles de medicamentos vencidos por no utilizarlos
Administración Entre 2019-2020 en el Almacén Central de la Secretaría de Salud entraron más de 2,447 millones de lempiras en medicinas, de las cuales proyectan que entre el dos y tres por ciento se vencerán
La decisión de los funcionarios de los hospitales públicos de comprar medicamentos de forma directa con precios sobrevalorados en vez de utilizar los disponibles en el Almacén Central de la Secretaría de Salud (Sesal) ocasionará el vencimiento de miles de medicinas.
EL HERALDO evidenció cómo en medio de la pandemia diferentes altos funcionarios se aprovecharon de la situación para adquirir medicinas para los hospitales por su propia cuenta, pagando millones de lempiras por fármacos que tenían al alcance de sus manos.
Al comparar las compras que realizaron se mostró que los precios varían considerablemente si se toma en cuenta las adquisiciones que realizó Sesal por medio del fideicomiso.
En consecuencia, en el Almacén Central se vencerá, según proyecciones internas, entre el dos y tres por ciento de la compra total que realizaron (la compra entre 2019 y 2020 fue de más de 2,447 millones de lempiras).
Por la mala coordinación aún no se deducen responsabilidades. En el Almacén Central rotan los medicamentos de acuerdo con las necesidades de los hospitales, los cuales tienen pleno conocimiento de los fármacos en existencia, pero al comprar por su propia cuenta dejaron abarrotadas las bodegas y el tiempo les pasó factura.
La ministra de Salud, Alba Consuelo Flores, justificó las compras debido a que se requería tener una reserva de fármacos además de la posibilidad que tienen los hospitales de realizar con el 10 por ciento de su presupuesto las compras que consideren sean necesarias para paliar las necesidades en sus centros asistenciales.
Otra situación que se prestó para el derroche de dinero en medicinas vencidas, pero en menor escala, es que durante la pandemia las personas por temor a contagiarse de covid-19 dejaron de visitar los hospitales y, por ende, de recibir medicinas.
Salud, por su parte, debió advertir la situación buscando la manera de hacer llegar las medicinas a las personas. Lo que no resultaba lógico era comprar más medicinas de las mismas que había en el Almacén Central a precios más altos si nadie las iba a reclamar.
La reposición de los medicamentos vencidos por parte de los proveedores pasa por un tema contractual en el que se deben revisar las causas por las que no se utilizaron los fármacos.
Reacción
En conversación con EL HERALDO, la ministra de Salud, Alba Consuelo Flores, explicó que las compras que se realizan son parte de una programación realizada por los hospitales y que se hace de manera trimestral o semestral, depende del caso.
La funcionaria justificó la gran cantidad de medicamentos embodegados en el Almacén Central a una planificación que realizaron.
EL HERALDO evidenció que centros asistenciales como el Hospital María de Especialidades Pediátricas el año pasado compró 100 ampollas de noradrelina a un precio unitario de 92 lempiras mientras Sesal las pagó a 43 lempiras.
La investigación reveló que, según la base de datos del Almacén Central, para las mismas fechas había 11,863 ampollas del mismo fármaco, por lo que no correspondía la adquisición.
“La existencia que hay en el Almacén es porque se han hecho las previsiones para un semestre de manera que los hospitales no queden desabastecidos en el año 2021”, comentó a EL HERALDO la funcionaria.
En relación con las compras
directas de medicamentos que realizaron durante la pandemia altos funcionarios de los hospitales, la ministra explicó que pueden adquirir una parte de fármacos con su presupuesto.
“Todos los hospitales tienen derecho a comprar un 10% del presupuesto, lo demás se adquiere a través del fideicomiso”.
Se le consultó a la ministra la diferencia de precios a la que compraron los funcionarios de los hospitales en relación con las adquisiciones realizadas por Sesal mediante el fideicomiso.
Flores argumentó que la diferencia obedece a que “el precio se determina por el volumen de compra, los hospitales solo compran el 10 por ciento, la Sesal compra el 90 por ciento de todos los hospitales a nivel nacional, a mayor volumen, menor precio”.
Especificó que en el caso del Hospital María de Especialidades Pediátricas y el Hospital Escuela son descentralizados, por lo que el proceso de adquisiciones es diferente.
3 por ciento de las medicinas compradas por Sesal entre 2019-2020 se vencerán por falta de rotación.
“En el caso del Hospital María, es un hospital descentralizado y tiene que realizar toda la compra, no la adquiere a través de la Sesal, igual es el caso del Hospital Escuela, es un hospital descentralizado, con presupuesto propio, no pueden acceder a los medicamentos del Almacén Central, solo en casos de emergencia”, aclaró Flores.
La funcionaria explicó a EL HERALDO que el medicamento del Almacén Central es para todos los hospitales centralizados, por consiguiente, aunque haya medicamento en existencia, esa es reserva para los hospitales nacionales centralizados, “no se puede evaluar y comparar existencias”.
Reiteró que el medicamento de los hospitales descentralizados lo compran del presupuesto asignado, no pueden ser dispensados del Almacén a menos que sea una emergencia.
Respecto a la gran cantidad de medicamentos que está por vencerse, Flores comentó que están dentro del rango planificado, por lo que no hay mayores preocupaciones, además del tema contractual que firmaron.
“Hasta la fecha hay algunos medicamentos que se han vencido que es el porcentaje aceptable (5 por ciento), pero las empresas realizan una devolución a través de un mecanismo carta de compromiso cuando el medicamento no cumple con los 24 meses de fecha de vencimiento, según condiciones ya establecidas en los procesos de compra”, argumentó Flores