Las claves para educar sin castigo físico
FORMAR A UN NIÑO ES UN RETO QUE CADA PADRE DEBE ASUMIR CON INFORMACIÓN, PACIENCIA Y EMPATÍA
Por décadas se ha implantado la idea de que solo se puede criar correctamente con castigo físico.
Agredir a un niño y pegarle hasta que al padre se le pase la cólera por su indisciplina no es precisamente un método respetuoso, ¿acaso cuando usted de adulto se equivoca lo corrigen a golpes?
Lo primero que debe pensar cuando un niño está cometiendo una acción que no debe ser permitida, es que entre los dos el adulto es usted, y él apenas es un ser en plena formación que en la mayoría de casos no sabrá gestionar sus emociones, y es usted, como adulto, quien debe ayudarle a lograrlo.
Si su hijo pierde la paciencia, es importante que usted la mantenga, si su hijo le da un manotazo, es importante que usted no lo golpee, porque no le está enseñando que lo correcto es no hacerlo, le está mostrando que él no puede hacerlo, pero usted sí, y probablemente repita esa misma conducta en un futuro con otras personas.
Cuando se habla de crianza respetuosa o disciplina positiva, no se refiere a permisividad, sino a la afirmación de que se puede llegar al punto medio siendo firmes y amables a la vez. La firmeza se consigue aplicando límites que respeten al niño, haciéndoles partícipes de las consecuencias de sus comportamientos y siendo coherentes con nuestras palabras y acciones.
Igualmente, debe respetar cada etapa del desarrollo de su hijo, no puede aplicar la mismas acciones en un bebé, un niño o un adolescente.
Es por ello que es sumamente importante que los padres se informen, que lean sobre crianza, recuerde que cada padre y madre no viene con un manual, y lo mejor ante esto es que esté preparado para brindarle a su hijo la formación adecuada para cada etapa de su vida, y evitar así repetir patrones negativos. Y recuerde, el mejor o peor ejemplo de sus hijos, es usted