Tras absolución, Trump mantiene su poder político
El Partido Republicano sigue perteneciendo a Donald Trump. Después de que Trump incitara un asalto mortal al Capitolio federal el mes pasado, el partido consideró apartar al rebelde expresidente. Pero al final, solo siete de los 50 senadores republicanos votaron el sábado a favor de condenar a Trump en su histórico segundo juicio político.
Para los leales a Trump, la absolución es una especie de reivindicación, y una reconexión con la combativa base de seguidores del exmandatario. Y para los que se oponen a Trump supone un alarmante indicio de que el partido está avanzando más en una peligrosa dirección, poco interesado en reconectar con los votantes a los que alejó Trump: moderados, mujeres y graduados universitarios.
En definitiva, la resolución del juicio político deja sobre la mesa las divisiones en el partido republicano que tendrán que gestionar los líderes, donantes y votantes en sus esfuerzos para retomar el control del Congreso en las elecciones de media legislatura el año que viene y para recuperar la Casa Blanca en 2024.
Sin embargo, a juzgar por los datos más objetivos, Trump conserva un férreo control sobre el Partido Republicano y su futuro