Chatarras se convierten en maceteras invasoras
Como un imán para atraer tierra y todo tipo de desperdicios, viejos automóviles permanecen enquistados en las estrechas calles del barrio Villa Adela.
Según el Instituto de la Propiedad (IP), si las personas ya no utilizarán sus automotores, tienen que reportarlos como inservibles para que no acumulen mora en su matrícula.
No obstante, si los dueños ni siquiera se molestan en retirar las inamovibles carrocerías, “mucho menos se moverán para hacer un trámite”, dijo una vecina. En diversas calles del lugar, los vehículos que una vez recorrieron la ciudad ahora reposan en el olvido a vista y paciencia de sus dueños, incómodos vecinos e indiferentes autoridades