La Pasión de Cristo desde la mirada de los más pequeños
Actos litúrgicos Parroquias que no fueron parte Ue las 14 estaciones, como San José Obrero y Salvauor Uel eunuo, recrearon la Mía Dolorosa con cuauros vivos infantiles, recorriuos en vehículo y alfombras
La imponente imagen de Jesús Nazareno llevando la pesada cruz a cuestas y encabezando el cuadro procesional del Vía Crucis no fue la única en la capital.
Los fieles de las parroquias de la Arquidiócesis que no forman parte de los 14 templos seleccionados como estaciones, también decidieron recorrer a su manera la Vía Dolorosa.
Una de ellas es la parroquia San José Obrero de la colonia El Pedregal, que inició el recorrido procesional en las primeras dos estaciones, una en Las Brisas y otra en La Betania, el resto se encontraban ya listas en su colonia. El fervor se sintió en cada paso y se tradujo en los cuadros vivos infantiles que personificaron cada estación y que estuvieron a cargo de una, dos o tres familias.
El párroco Ricardo Sevilla manifestó que es importante mantener presente este acontecimiento para preservar la fe en Jesucristo.
“Lo que se tiene que hacer ahora es ser creativos para poder motivar a la gente y así mantener la fe y tener presente todo lo que pasó Jesucristo para poder redimir a la humanidad”, expresó.
En el templo se realizó además la preparación de la escultura del Cristo Yacente y la velación, previo al Santo Entierro.
Esta parroquia no fue la única. En la Divino Niño de la Universidad Católica, su párroco, el padre Ovidio Rodríguez, recorrió varias colonias con el Vía Crucis y con un mensaje de fe.
Alfombra
Una de las esquinas del barrio El Manchén fue ocupada por una alfombra de aserrín con el rostro del Hijo de Dios, para decorar las estaciones del Vía Crucis de la parroquia Cristo Rey, a cargo de los jóvenes de la parroquia.
Otra de las actividades litúrgicas fue la interpretación infantil inundada de devoción, de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo, en la parroquia Salvador del Mundo de la aldea Cerro Grande