A EJERCITARSE SEGÚN LA META QUE PERSIGUE
No es lo mismo entrenar para bajar de peso que hacerlo para ganar músculo o tonificar su cuerpo. Aquí una pauta
Escoger el plan de ejercicio adecuado dependerá de cuál sea el objetivo que se ha fijado. No todas las rutinas favorecen en un mismo sentido, por lo que asesorarse es indispensable.
Llevar un estilo de vida más saludable y aprovechar los múltiples beneficios que el ejercicio físico ofrece debería ser un factor común para todos. Lo que sí puede variar entre unos y otros son las metas personales que se persiguen y el método elegido para llegar a ellas.
Por decirlo de otra manera, no todos quieren bajar o subir de peso, ni ganar masa muscular, tonificar o definir el cuerpo por completo. Y cada finalidad es válida, siempre y cuando no perjudique su salud ni su integridad durante el proceso. Entonces, ¿cómo entrenar según sus propios objetivos?
Lo primero que debe tener en cuenta es que combinar diferentes tipos de entrenamiento (aeróbico, aneróbico y de flexibilidad, por mencionar los principales) es la recomendación general. Lo que va a marcar la diferencia es la prioridad que le brinde a cada uno y el plan de alimentación con que lo acompañe.
Por ejemplo, una persona cuya prioridad sea bajar de peso y disminuir su porcentaje de grasa corporal hará más énfasis en rutinas de cardio. Salir a caminar o a trotar, practicar zumba o inscribirse en clases de spinning son opciones válidas. Pero, ojo, que sumar ejercicios de fuerza, como las pesas, le brindará mejores resultados.
Quienes buscan hacer crecer sus músculos deben saber que entrenar hasta el fallo, con el mayor peso posible, y llevando una dieta alta en proteínas, es el camino más
Tips básicos para todo el que quiere ejercitarse
Los ejercicios aeróbicos fortalecen el sistema cardiovascular y respiratorio. Están basados en la resistencia. Los más comunes son caminar, correr, nadar, jugar fútbol, bailar, etc. Ayudan, sobre todo, a perder peso.
Los anaeróbicos mejoran la potencia y la masa muscular. Son ejercicios basados en la fuerza. Se realizan comúnmente a través de pesas o máquinas que ejercen una resistencia a la contracción del músculo.
Los ejercicios de flexibilidad mejoran la capacidad de estiramiento y movimiento de músculos y articulaciones. Practicar yoga, pilates o tai chi son buenas opciones. Complementan los dos tipos anteriores.
Un punto muy importante al momento de trabajar grupos de músculos en específico es dejar suficiente tiempo de por medio para descansar (al menos 48 horas entre cada rutina), esto ayudará a la recuperación de la zona.
Descuidar la alimentación es un grave error. El 70% de los resultados dependerá de la dieta que acompañe el ejercicio.
funcional. Por supuesto, se trata de un proceso llevado poco a poco. Menos repeticiones, con mejor técnica y en carga progresiva es la receta por excelencia.
Y en la etapa de definición, que suele venir después de la fase volumen en aquellos que van metiéndose de lleno en el mundo fitness, la fórmula se invierte. Ahora se trata de alcanzar el número máximo de repeticiones, sin necesidad de cargar o soportar mayor peso. Eso sí, un déficit calórico guiado por un nutricionista es fundamental.
Pero estas son apenas algunas pautas generales respecto al enfoque de los entrenamientos. Si usted quiere acercarse más prontamente a su meta individual y lograr cambios significativos en su cuerpo, debe asesorarse con un entrenador personal que le brinde lineamientos específicos, además de guiar su dieta con un profesional