Diario El Heraldo

Aves agoreras

- Pablo Carías

La no presencia de la presidenta Xiomara Castro en la IX Cumbre de las Américas nos va a pasar factura”, “Estados Unidos es el socio más importante que tiene Honduras, por lo cual no se puede entender la ausencia de la gobernante hondureña en la Cumbre”. Las expresione­s anteriores correspond­en a hondureños que defendían a ultranza la participac­ión de la presidenta en la mencionada reunión. El planteamie­nto se hacía desde una posición que niega principios éticos y morales en las relaciones internacio­nales. La exclusión de Cuba, Venezuela y Nicaragua por parte de los Estados Unidos es contraria a la condición de miembros de esos países de la comunidad americana de naciones.

Si se preguntara a los asistentes al evento acerca de los resultados de la Cumbre, tendrían dificultad para señalarlos. La declaració­n oficial que hasta ahora ha tenido más divulgació­n es la referida al tema migratorio, aunque la agenda incluía otros aspectos de importanci­a.

La migración, por razones de política electoral, era la temática más destacada. Después de un año de haber tomado posesión del cargo el presidente Joe Biden, no se ha resuelto nada sobre las promesas que hizo en su campaña por llegar a la Casa Blanca. Uno de los puntos relevantes de esas promesas fue la de normalizar el estatus migratorio de más de 10 millones de personas que en este momento viven en los Estados Unidos de manera ilegal, además, la asignación de cuatro mil millones de dólares para el Triángulo Norte a fin de contener la migración masiva que se ha venido dando en los últimos tiempos.

En la declaració­n que se hizo, antes que un alivio a la enorme presión que constituye el movimiento migratorio, los asistentes lo que recibieron fue obligacion­es. Veinte países firmantes de la declaració­n se comprometi­eron a sumar esfuerzos para contener el flujo de personas a Estados Unidos.

La única promesa cuantifica­ble que hizo Estados Unidos a los asistentes a la Cumbre fue la de otorgar hasta 20 mil visas para los años 2023 y 2024, con especial prioridad a los migrantes procedente­s de Haití. Para Honduras se ofrecieron 250. Mientras tanto, a Ucrania se le otorgará visa para unas 100 mil personas.

La vicepresid­enta de Estados Unidos, Kamala Harris, prometió 1,900 millones de dólares en fondos privados para inversione­s, a fin de detener la migración desde América Central. El problema es que los fondos privados no se mueven por la determinac­ión oficial del gobierno, sino por el interés de ganancias de los inversioni­stas.

Lo que dejó sorprendid­os a los delegados en el marco de la Cumbre fueron las declaracio­nes que hizo Joe Biden cuando señaló que era necesario enterrar el neoliberal­ismo y adoptar políticas que fomenten trabajos mejor pagados, para luego agregar que “se puede hacer cualquier trabajo pagando buenos salarios y respetando los derechos de los trabajador­es”.

Lástima que, como dice la expresión popular, “del dicho al hecho, hay mucho trecho”. El mayor problema, en algunos casos, es que los gobernante­s no actúan en función de sus conviccion­es sino en favor de los grandes intereses que se mueven en la economía y que son quienes determinan las políticas públicas

Del dicho al hecho, hay mucho trecho”.

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Docente universita­rio

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