CARTASA LA DIRECCIÓN
¡Madre! En el nombre de madre se encierra la más alta expresión del amor porque no puede haber en la tierra una imagen más clara de Dios.
Cuando abrimos los ojos inquietos al primer resplandor de la vida en su pálida faz conmovida nuestra dulce y primera visión.
Y al entrar al ignoto camino a su sombra benéfica y santa cada espina que hirió nuestra planta la convierten sus manos en flor.
Madre, que eres consuelo en el llanto la esperanza y la fe del camino árbol bueno que da al peregrino el descanso, el abrigo y la paz.
Santifica tu amor de tal modo que Dios mismo al morir torturado sublimó su martirio sagrado con tu beso postrero en su faz. PUEDES OPINAR EN ESTE ESPACIO: TU ARTÍCULO NO PUEDE TENER MáS DE 150 PALABRAS ENVÍALO A: CARTAS@LAPRENSA.HN Como un culto hoy Honduras consagra a tu gloria inmortal este día Madre que eres el bien, la alegría el amparo, la luz y el perdón.
Que tu excelsa virtud traspasando el misterio de edades remotas se dilate en las cálidas notas que palpitan en esta canción. Lo aprendemos de pequeños y según pasanlosdías, mesesy años quizás noloolvidamos, perosídejamosde sentirlo y por eso muchos de nosotros nos limitamos aun día como hoy, segundo domingo de mayo, y concentramos los poco que nos queda en regalos, visitas, pero todo bastante superficial y presiona dos por las condiciones sociales. Tenemos mucho que corregir en la atención, el respeto, el cariño ya moral a madre para que las palabras generen una sonrisa de satisfacción, peroesenla uniónfamiliar-hijos, nietos- donde ella vive con mayor intensidad los años de su existencia. Emoción con el himno, pero bienvenida la unión de la familia, el mejor regalo para la madre. MIGUEL TÁBORA Z.