Más de 30,000 uniformados vigilarán las elecciones
Todas las unidades de las Fuerzas Armadas trabajan desde ya en el proceso electoral. La Policía Nacional ha suspendido las vacaciones de sus elementos
SAN PEDRO SULA. Más de 30,000 hombres uniformados, entre militares y policías, custodiarán todo el material electoral y vigilarán los comicios generales en los cuales, por primera vez, un presidente buscará la reelección y varios partidos participarán como una alianza opositora. Las elecciones del próximo 26 de noviembre (el décimo proceso desarrollado bajo la Constitución de 1982) serán celebradas en un ambiente de mayor estabilidad social y con mínimas amenazas, comparadas con las observadas en los últimos dos ejercicios. Esta vez, 6.2 millones de ciudadanos convocados por el Tribunal Supremo Electoral ( TSE) podrán asistir más confiados a las urnas y despejados de las presiones que, en algún momento, sintieron por razones ideológicas o por las injerencias de poderes fácticos, como el narcotráfico. En noviembre de 2009, cuando Porfirio Lobo Sosa se convirtió en presidente, los hondureños asistieron a las urnas en medio de un ambiente de tensión y dentro de la polarización ideológica detonada por el derrocamiento en junio de ese año del presidente Manuel Zelaya Rosales y el nombramiento de Roberto Micheletti como jefe de Estado. En 2013, en medio de una ola de violencia (con 75 homicidios por cada 100,000 habitantes) los hondureños lograron elegir presidente a Juan Orlando Hernández. En 19 días, los hondureños, con diez partidos, dos de ellos en alianza, celebrarán el proceso en un contexto opuesto, más seguro y con menos violencia (36 homicidios por cada 100,000 habitantes, de acuerdo con estimaciones preliminares de la Policía Nacional), sin la presencia en el territorio de más de 30 capos de la droga (ahora extraditados) que incidían en los partidos y con menos financiamiento de dinero ilícito, gracias a la Ley de Financiamiento, Transparencia, Fiscalización a Partidos Políticos y Candidatos. Aunque el escenario presenta menos condiciones proclives a la violencia, toda la estructura de las Fuerzas Armadas ya está involucrada en el proceso eleccionario. Todas sus unidades vigilan las fronteras, las ciudades y custodian los talleres gráficos donde son impresas las papeletas electorales. “Más de 16,000 elementos de las Fuerzas Armadas participarán solo en el transporte, custodia y seguridad en centros de votación. Las Fuerzas Armadas están diseminadas en todo el territorio y están coordinadas; por ejemplo, el material saldrá para Santa Rosa de Copán donde está la 120 Brigada de Infantería que tiene unidades orgánicas, como el 12 Batallón (Santa Rosa), el 16 Batallón ( Gracias, Lempira). Estos batallones tienen responsabilidad territorial y tienen personal para trasladar el material a los municipios y centros de votación”, explicó el coronel Alfredo Cerrato Paz, director de relaciones públicas de las Fuerzas Armadas. En este momento, un contingente militar mantiene vigilados 11 talleres de impresión de Tegucigalpa, que dejarán esos hasta que concluyan toda la producción de las papeletas y las trasladen a las bodegas del TSE, en Te-
Delitos electorales Apoyados en tecnología, identificarán a personas que atenten contra el material electoral.
"las fuerzas armadas ya están dando seguridad y tenemos planes de contingencia"
ALFREDO CERRATO Fuerzas Armadas "el 100% de la policía estará listo para garantizar la paz y seguridad de todos los ciudadanos”
VAIRION SAUCEDA Policía Nacional
gucigalpa. Las Fuerzas Armadas, de acuerdo con el calendario del TSE, tienen previsto trasladar las primeras maletas electorales el próximo 20 de noviembre a Colón, Copán y Ocotepeque, y en los siguientes días al resto de departamentos. Esa misma fecha, ha indicado el TSE, concluirá el período de propaganda electoral y concentraciones políticas y, a la vez, iniciará el silencio electoral durante el cual los políticos solamente podrán utilizar los medios de comunicación para explicar y difundir sus propuestas de programas de gobierno, pero no podrán solicitar de manera directa el voto. “Esta elección será bastante
diferente. Hay más candidatos. Esto despierta más entusiasmo en los ciudadanos. Nosotros percibimos mayor tranquilidad; sin embargo, las Fuerzas Armadas están preparada y tiene planes de contingencia para actuar en caso de que se presente alguna anomalía”, dijo Cerrato. En cada uno de los 5,687 centros de votación del país, las FuerzasArmadasdispondrán de varios dispositivos de seguridad. El primero estará próximo a las urnas y los siguientes en las entradas y en los alrededores como escudo contra el ingreso de personas que intenten cometer algún delito o pretendan alterar el orden. Además de los hombres uniformados y armados, entre
ellos los de la Policía Militar, en las calles y centros de votación habrá elementos vestidos de civil para realizar el trabajo de inteligencia “y poder predecir cualquier eventualidad que se pueda presentar”. “Las Fuerzas Armadas, con todos los cuerpos seguridad integrados en Fusina (Fuerza Nacional de Seguridad Interinstitucional), garantizará la seguridad del proceso. La institución está haciendo uso de todos sus recursos, aéreos, marítimos y terrestres. A algunos lugares, el material electoral llega de manera área y a otros vía marítima. Nosotros ya tenemos un plan de acuerdo con las necesidades del departamento”, explicó Cerrato.
Preparados.
Mientras la Policía Nacional, con nuevas entidades, como la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) y la Dirección Policial de Investigaciones ( DPI), participará con una estructura depurada, libre de miembros corruptos, y con el apoyo de tecnología que no tuvo en procesos generales pasados. “El 100% del personal de la Policía Nacional está listo para participar en estas elecciones. A todos se les ha
cancelado las vacaciones y permisos a partir del 20 de noviembre. Estamos todos mancomunados en este esfuerzo para garantizar la paz y seguridad a todos los hondureños”, dijo Vairion Reinerio Sauceda, subjefe de Comunicaciones Estratégicas de la Policía Nacional. Antes, durante y después de las elecciones, la Policía Nacional tendrá disponibles las unidades de élite Cobra y Tigres para intervenir y disolver cualquier amotinamiento que tenga como objetivo boicotear el proceso. Contará con miembros vestidos de civil para trabajar en labores de inteligencia. “Nosotros, como Policía Nacional, debemos estar a una distancia prudencial de los centros de votaciones, la Ley Electoral lo manifiesta; pero nosotros vamos a tener una comunicación fluida con los presidentes de las mesas por si se llega a dar un hecho que no esté acorde con las elecciones. En esos casos, nosotros tendríamos que intervenir”, explicó Sauceda. Los elementos de la Policía Nacional, en caso de ser llamados por el presidente de la mesa electoral receptora, actuarán de manera conjunta con la Policía Militar.