¡Misión cumplida!
Jesús Echeto Belzarena, el maestro que sembró educación a través de sus 25 años del apostolado en la enseñanza de la educación superior, un docente que además de compartir el pan del saber se ganó la confianza y el cariño de los educandos y compañeros en el templo del conocimiento universitario de la alma mater. Con la renuncia del licenciado Echeto le decimos ¡misión cumplida!, pues con su sabia pedagogía apegada a la técnica y métodos del proceso enseñanza-aprendizaje fue un alfarero de barro fino que formó a tantos estudiantes hombres y mujeres que le recuerdan y estamos seguros de que le dan las gracias por esa herencia de conocimientos. La carrera de Periodismo de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras en el Valle de Sula (Unah-vs), estudiantes y docentes nos sentimos agradecidos, honrados y privilegiados de haber tenido a este ilustre profesor y haber compartido tantos momentos dentro y fuera de los espacios áulicos, los cuales quedan archivadas en el libro de la historia educativa. Desde que comenzó sus labores en el mes de mayo del año 1992 le recordamos por sus profesionales competencias, su disciplina y puntualidad en las aulas, y muchos educandos le recuerdan como un experto de la castiza gramática española. Al principio, muchos murmuraban de esta exigencia del maestro Echeto, pero al final le agradecían. Además de su buen carácter era normal que mientras hacía ese recorrido por el pasillo hasta la penúltima aula 211, donde impartía sus clases, venía haciendo todo tipo de bromas, especialmente deportivas. Estamos seguros de que nadie quisiera que se fueran estos compañeros maestros, como el caso especial del docente Echeto, que nos impresionó el martes pasado 21 de noviembre del año 2017 al presentar su renuncia. Querido maestro Echeto, usted dejó las puertas abiertas.