Fieles acuden a venerar a la madre
Desde los más humildes rincones de Honduras llegan los devotos al altar de la Morenita para venerarla Este día están programadas cinco misas en la basílica menor
TEGUCIGALPA. Durante todo el año, la Patrona de Honduras, la Virgen María de Suyapa, recibe las muestras de fervor y devoción de los miles de fieles peregrinos que acuden a su encuentro. Pero es en estos días de fiesta, con motivo del hallazgo de su venerada imagen, que la basílica menor y la ermita de Suyapa se convierten en el epicentro de la fe católica. Ayer la pequeña Danna Isabel Mejía (de 8 años) se apoyaba en la silla de ruedas de su abuela. Con dulzura mira a la señora que hace siete años acudió a la capilla de las velas para pedir con fervor por la sanación de su nieta. Danna se mantiene en pie gracias “al milagro que la Virgen de Suyapa hizo en mí”, expresó la pequeña, mientras la mirada de su abuela comienza a recordar con lágrimas la pena por la que acudió a visitar a Suyapa. Según relató Isabel Moncada (de 62), su nieta fue afectada en el nervio ciático, producto de una mala práctica médica, y esto le impedía movilizar sus extremidades inferiores. “Yo le pedí con fe a la Virgen de Suyapa que nos auxiliara, que le diera la oportunidad de caminar”, expresó doña Isabel. La sexagenaria recuerda que cuando fue con su familia a pedir por la salud de su querida nieta sintió una calma en su corazón que le indicaba que su familiar sanaría. “Mi nieta gracias a Dios comenzó a caminar, fue un milagro”, exclamó con fe la abuela de Danna. Hace poco menos de tres años que a la señora le tuvieron que amputar el pie derecho, producto de la diabetes que padece. Ahora es su nieta y su hija quienes oran por ella para que pueda salir adelante de esta adversidad. “Hemos venido a pedirle a la Virgen por la salud de mi madre y para agradecerle por mi hija que hoy puede caminar”, expresó emocionada Tatiana Mejía, hija de doña Isabel. Ahora Danna sabe que tiene a tres mujeres que le brindan paz, amor y seguridad: su madre Tatiana, su abuela Isabel y su madre celestial, la Virgen de Suyapa. Este día la fiesta será mayor, miles de personas se congregarán para rememorar el hallazgo de la Morenita.