La obesidad infantil se vence dentro de la casa con buenos hábitos
SAN PEDRO SULA. La mejor forma de evitar que sus hijos sufran de obesidad es cambiar su estilo de alimentación, hacer ejercicio y limitar el uso de los aparatos electrónicos. Los niños desde edades tempranas pueden sufrir de este terrible mal, sino se pone un alto pueden llegar a desarrollar diabetes mellitus, problemas cardiacos, hígado graso, malformaciones del esqueleto y dermatológicos. Además afecta su salud emocional y social. La nutricionista Danori Carbajal comenta que la obesidad infantil se caracteriza cuando el peso corporal está arriba del peso medio correspondiente a la edad. Está relacionado a la ingesta adecuada de alimentos, baja actividad física. Y es desencadenada por factores ambientales, biológicos, hereditarios y psicológicos.
Las señales de obesidad infantil son: hay una ganancia de peso rápido. Al niño se le marcan unos “rollitos” en la cintura y además tiene celulitis evidente. Puede tener un factor de riesgo cuando pasa más de dos horas frente a la televisión y además tiene un apetito incontrolable. Busca comida frecuentemente. Consume porciones superiores a las porciones que consumen niños de la misma edad.
La experta indica que se deben mejorar los hábitos alimenticios del niño para revertir esta condición. Estos son los hábitos alimenticios que debe seguir en su hogar:
ofrezca variedad en la dieta diaria, de esta forma tendrá una mayor garantía que la comida será equilibrada y que contenga todos los nutrientes necesarios.
de manera que los carbohidratos representen entre el 50% a 60% de calorías en la dieta. Incluya cereales integrales, pasta, panes, tortillas, y legumbres. no debe superar el 30% de la ingesta diaria. Reducir el consumo de la grasa saturada y ácidos grasos.
debe estar entre el 10 y 15% de calorías totales. Cambiar de proteína de origen animal a la vegetal. Frutas, verduras y hortalizas: aumento su consumo. Debe comer cinco porciones al día.
Los padres deben procurar sentarse con sus hijos a comer para disfrutar de ese momento.
el consumo de productos ricos en azúcares simples. el consumo de sal
y sodio. La nutricionista indica que se puede incorporar al niño en las compras del supermercado. Decidir con él el menú y que le ayude a cocinar los alimentos