Practicar ciclismo mejora el suelo pélvico
Evite terrenos que exijan grandes esfuerzos, lo ideal son superficies planas.
Andar en bicicleta es una actividad poco agresiva para el suelo pélvico, ya que el impacto es muy bajo; sin embargo, en algunas situaciones puede ser perjudicial debido a las posturas que adquirimos, como ocurre durante una clase de spinning o al pedalear sobre un terreno irregular que nos obliga a levantarnos del sillín. En esta posición, el suelo pélvico es sometido a una mayor presión y, por tanto, el efecto beneficioso disminuye. Ahora bien, puede sortear este inconveniente siguiendo los consejos: pedalee en una postura erguida, adapte la altura del manillar y coloque el sillín de tal modo que las piernas se mantengan semiflexionadas.