YangYang,
yaustralianos”, aseguraBukovsky. YangYangysuacompañante en el recinto de Schönbrunn, Long Hui, llegaron al zoológico de Viena en 2003 tras firmar Austria un acuerdo con el gobierno de China, que cobra una especie de “alquiler” de permitir que los animales estén en Viena. A través de esta cuota económica, que China cobra a numerosos zoos en todo el mundo, se financian reservas naturales y centros de cría en China para la protección de la especie.“El 70 % del dinero se destina a la conservacióndelpandagigante, el 20 % a la cría y centros de investigación y el 10 % al refuerzo administrativodenuestrosocio chino”, aclara Bukovsky. El oso panda gigante es uno de los mamíferos más amenazados del planeta, aunque en los últimosañoslasituaciónhamejorado un poco y la Unión Internacional para la Conservación delaNaturaleza(IUCN) anunció en 2017 que el panda gigante ha pasado de ser una especie en “peligro” a ser una especie “vulnerable”. Según datos de la organización de protección del medioambienteWorldWildlife Fund (WWF) en la última década el panda gigante ha experimentado un crecimiento de su población del 17 %. Así las cosas, a día de hoy hay unos 1,860 pandas gigantes en la naturaleza, en estado salvaje. Para Georg Scattolin, del WWF Austria, el trabajo artístico del zoo de Schönbrunn con el panda no constituye ningún tipo de abuso de los derechos del panda, ya que Yang Yang acude a la jaula a pintar de forma voluntaria cuando tiene ganas de hacerlo. El éxito reproductivo múltiple de los pandas en el zoológico de Viena es una buena prueba de que los animales estánmuybiencuidadosensus instalaciones”, concluye. No es laprimeravezqueSchönbrunn convierteaunodesusanimales en artistas. Ya que en los años 1990 se hizo famoso uno de sus orangutanes, Nonja -fallecida este año a los 42 años edad- por pintar cuadros, aunque éstos eran de colores.