Aprenda a confiar en sus ideas siempre
Antes que cambiar sus acciones, quizá tiene que cambiar la forma en que mira las cosas
REDACCIÓN. Es común que al paso de los meses los propósitos se vayan diluyendo y al final de cada año, al hacer un balance se da cuenta de que sus metas se quedaron en la etapa de buenos deseos. ¿ Por qué nos pasa esto? ¿ Será que sólo unos cuantos nacieron con el talento y la “suerte” para lograr sus objetivos? ¿Será que no hice un buen planteamiento de las metas? La mayoría podrá contestar con miles de razones o más bien excusas de por qué no llevaron a cabo lo que se proponían: “No tuve el tiempo”, “mis circunstancias cambiaron”, “son tiempos difíciles”, “Fulanito tuvo la culpa”, etc. Desarrolle el hábito de escuchar sus pensamientos a lo largo del día y detecte si su mente está jugando a favor o en contra de usted mismo. En cuanto observes pensamientos y emociones tóxicos, cambie la narrativa y reencuadre las cosas.