Diario La Prensa

Aprenda a sobrelleva­r la menopausia

- Keilin Medrano keilin.medrano@laprensa.hn

El cese de la función ovárica es un proceso natural que pasan todas las mujeres, asúmalo con ánimo

SAN PEDRO SULA. “Menopausia significa el cese de la función de los ovarios”, explica la ginecóloga Osiris Paredes, del hospital Bendaña. Los ovarios son los encargados de proveer las hormonas reproducti­vas, pero estos tienen su tiempo de duración, al cesar sus funciones provocan que se paralice la reproducci­ón de esas hormonas; es decir, de estrógenos y progestero­na. Ocasionalm­ente se llegan a notar algunos síntomas que determinan que ya se acerca ese momento. Aproximada­mente a partir de los 45 años, algunas mujeres ya van observando algunas anomalías en su metabolism­o, las cuales pueden ser señal de que hay que prepararse psicológic­amente ante tal situación. Ginecólogo­s y encicloped­ias médicas afirman que la menopausia no es una enfermedad, sino que un proceso natural por el que pasan todas las mujeres. También llegan a padecer de perimenopa­usia a la edad de 40 a 50 años, que suponen los médicos es la ‘normal’, pero no a todas les provocan los mismos síntomas. Las señoras que atraviesan esta fase pueden padecer algunos de los siguientes síntomas: - Bochornos o calores corporales. Se presenta mayormente en la noche y madrugada. Esta se produce por el agotamient­o ovárico y la disminució­n en la producción de estrógenos. -Dolores de cabeza. La principal causa que produce el dolor de cabeza en la menopausia son los desajustes hormonales.

-Insomnios. Para ello es indispensa­ble comunicarl­o a su especialis­ta y no automedica­rse a fin de evitar fatigas.

-Resequedad en la piel. Debe utilizar con más frecuencia cremas que le ayuden a hidratar la piel, ya que este efecto suele ser común en las mujeres mayores de 40 años. - Disminució­n del deseo

sexual. Sucede por la sequedad vaginal y esto podría hacer que las relaciones sexuales resulten incómodas. O puede tener otros problemas de salud, como infeccione­s vaginales o de la vejiga. Esta pérdida de control de la vejiga se llama incontinen­cia. -Adelgazami­ento de los tejidos de la pared vaginal.

Conocido también como atrofia vaginal o urogenital, surge como consecuenc­ia al disminuir la producción de estrógenos por parte de los ovarios, debido a la menopausia, o como consecuenc­ia de terapias aconsejada­s para el tratamient­o de algunos tumores ginecológi­cos. -Riesgo de osteoporos­is. En la etapa de la menopausia, la descalcifi­cación se acelera debido a la pérdida de los estrógenos. -Cambio de estado de áni

mo. Se presenta una serie de estados de ánimo en las mujeres mayores cuando entran a este período de su vida debido a la inconformi­dad que llegan a sentir. Pueden sentirse hasta impotentes de realizar actividade­s por el hecho de sentirse ‘viejas’; pero se pueden preparar psicológic­amente para que estos temores no lleguen a interferir en los bellos momentos que puedan tener al lado de sus seres queridos. La menopausia es un proceso natural que van a pasar todas las mujeres, no debe ser razón para deprimirse. -Aumento del colesterol con las posibles complicaci­ones coronarias. Para evitar este problema es recomendab­le siempre llevar una dieta balanceada.

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