La aldea que entró a la modernidad
“Tegucigalpahoyes unaurbemoderna yen desarrollo, pero con diversos problemasaúnpor resolver”
El pequeño poblado rural constituido en 1536 a las orillas del río Choluteca con el peculiar nombre de Taguzgalpa, arribó ayer a sus 440 años de fundación y hoy se ha convertido en una metrópoli pujante y moderna. Según datos históricos, Tegucigalpa fue fundada el 29 de septiembre de 1578 bajo el nombre de Real de Minas de San Miguel de Tegucigalpa y tres siglos después, el 30 de octubre de 1880 se convirtió en la capital de Honduras, durante la presidencia de Marco Aurelio Soto. Entre 1824 y 1839 fue declarada un distrito federal y capital de los estados confederados de El Salvador, Guatemala y Honduras, Sin embargo, este intento unionista fracasó y Honduras tuvo que continuar como estado independiente. El 30 de enero de 1937, se reformó el artículo 179 de la Constitución de Honduras de 1936 y de esa forma las ciudades de Tegucigalpa y Comayagüela pasan a convertirse en el municipio del Distrito Central. Desde entonces han pasado muchos hechos que han marcado la historia de esta urbe, uno de los más aciagos fue el paso del huracán Mitch en 1998 que prácticamente redujo a escombros gran parte de la ciudad y dejó una estela de muerte y dolor. Justamente este mes de octubre, se cumplen 20 años de ese fatídico evento climatológico que puso de rodillas a los capitalinos, pero hoy la cara de la metrópoli es totalmente otra gracias a la unidad, laboriosidad, dinamismo y empeño de sus autoridades y su gente. Dos décadas después, la capital volvió a levantarse de las ruinas y hoy se ha erigido como una de las urbes de mayor desarrollo del país, desplazando a San Pedro Sula. No obstante, la capital sigue adoleciendo de graves problemas que ameritan una atención urgente, como por ejemplo la escasez de agua,la inseguridad ciudadana, la pobreza, la contaminación ambiental y otros más. Ahí es donde deberán enfocar sus esfuerzos las autoridades municipales y centrales para continuar por esa ruta de progreso y modernidad.