La historia de “Chilo” Acosta, el soldador y eterno animador del Vida
El fanático cocotero y exfutbolista reveló el origen de la famosa canción del club
ATLÁNTIDA. Hay pasiones tatuadas con sentimientos únicos que quedan impregnados en nuestros corazones por décadas. Así se traduce el sentir de José Isidro Cruz Acosta, el fanático fiel y animador del Vida conocido popularmente como “Chilo”. EnLaCe iba es uno de los hombres más queridos. En las calles todos lo reconocen yen el estadio Municipal Ceibeñ otodos aman su peculiar cántico titulado“Pone le Vida” que engalana los cuatro vientos durante los juegos como local. Detrás de esa careta de felicidad de José hay mucho por contar. El origen de su peculiar apodo es una de ellas. Fue inscrito en el Registro Nacional de las Personas como Isidro (su madre había dicho Isidoro), efecto del sello su barrio. “Viene del barrio. Mi madre me dijo que lo arreglara, pero yo dije -que se quede así -, ya la gente quedó con eso, es una bendición de Dios. Ese es el famoso, José no lo es… ¡qué lindo oye!”, alzó con el semblante de felicidad. Por más de una década, Cruz (de 67 años) ha llevado alegría a los estadios. Hoy tras todo ese pasaje remembra en los inicios que lo contagiaron con este club. “Nosotros somos Vida por papá y mamá, esos son los que nos llevaron ese valor para que fuéramos vida,” comentó. Sobre el origen del famoso cántico revela que “en un momento me llamó don Hugo (expresidente del Vida) y me dijo que reuniera a un grupo para hacerle una canción al Vida. De ahí comenzó todo con un grupo selectivo de 15 fieles animadores”. Sin duda, Chilo Acosta es un personaje. En su juventud quiso ser futbolista profesional, pero una desafortunada lesión ( le quitaron los meniscos de su rodilla) le quitó el sueño. Fuera de los encuentros futbolísticos, lleva una vida normal. No es rico, apenas sobrevive con L4,000 mensuales producto de su trabajo como soldador. En las calles ronda con una peculiar bicicleta bautizada como“Vida ”, una insignia oculta del club. Sus necesidades económicas es lo de menos para él, la sonrisa que dibuja en su rostro contagia a cualquiera. Su felicidad gratase traduce de ver al Vida jugar y ganar.
Lo dijo “Chilo” en exclusiva: “Es bueno nunca pensar en la maldad. Les aconsejaría cerrar lo bueno en su cabeza, lo malo déjalo ir”.