Diario La Prensa

SICARIO LE HACE PARADA Y LO MATA

El crimen ocurrió en la autopista hacia Puerto Cortés

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SAN PEDRO SULA. El joven Pablo Alexis Rivera Hernández (de 22 años) se convirtió ayer en la tercera víctima de los homicidios perpetrado­s este año en contra de motoristas de la empresa de rapiditos Emtrasecho, que cubre la ruta de esta ciudad al sector López Arellano, de Choloma. El crimen contra Rivera se suscitó cerca de las 11:00 am en la autopista que de San Pedro Sula conduce a Puerto Cortés, en el lugar conocido como la Vuelta del Cura.

Huye. Las autoridade­s policiales indicaron que, según lo informado por testigos, el rapidito, con número de registro B59 de la empresa Emtrasecho, conducido por Rivera, iba rumbo a la López Arellano y en la referida curva un hombre le hizo señal de parada para abordar la unidad de transporte. Cuando el conductor paró el individuo se acercó a la puerta del acompañant­e de enfrente y con una pistola le disparó en la cabeza al chofer. El individuo, luego de matar al conductor, salió corriendo y se subió a una motociclet­a en la que estaba un compinche suyo esperándol­o para huir. Compañeros de trabajo de Rivera que llegaron a la escena del crimen manifestar­on que él era un joven muy humilde, que no creen que le hayan quitado la vida por situacione­s personales, sino que por problemas del transporte. Agregaron que Pablo Alexis tenía más de siete años de trabajar en esa ruta de buses, en la que inició como ayudante y hace unos tres meses empezó a trabajar como motorista. Ayudantes y motoristas de la ruta en la que trabajaba el ahora occiso expresaron que trabajan con temor porque en cualquier momento son víctimas de la insegurida­d que impera en el país, sobre todo que tanto afecta al sector transporte, “donde camina- mos con la vida vendida”. Asimismo, contaron que ese rubro se ha vuelto uno de los más riesgosos, pero dijeron que no dejan de laborar en los buses porque no encuentran donde más trabajar. Agregaron que ellos siempre piden más seguridad, pero de nada sirve porque las autoridade­s hacen caso omiso a sus peticiones y lo que les queda es encomendar­se a Dios nada más. De acuerdo con los compañeros de ruta, este año con Pablo Alexis Rivera han matado a tres trabajador­es de los rapiditos.

Drama. A la escena del crimen llegó Pablo Rivera, padre del motorista victimado, quien el ver a su hijo muerto con su cuerpo recostado sobre el asiento del copiloto gritó: “Que impotencia siento, te dije y te rogué que te salieras de esto, pero no hiciste caso”.

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