Tropas a la frontera: Medida necesaria o maniobra electoral
El análisis de Rafael Salido pone en duda que la acción de enviar al Ejército a la frontera sea solo por seguridad, pues las elecciones están muy cerca
WASHINGTON. El anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de que enviará hasta 15,000 militares a la frontera con México para colaborar en tareas de control y vigilancia ha avivado la polémica sobre una operación, que algunos ven como una maniobra electoralista, mientras la Casa Blanca la ve necesaria. “Llegaremos a los 10,000 o 15,000 militares, aparte de los agentes fronterizos, el Servicio de Inmigración y Aduanas ( ICE) y de todos los demás que están en la frontera. No va a entrar nadie”, aseguró el mandatario instantes antes de partir rumbo a Florida, ante el avance por México de dos caravanas de miles de migrantes en dirección a EEUU. De materializarse este anuncio, la presencia militar en la frontera sur, cuya misión será impedir el acceso de unos migrantes que se encuentran aún a cientos de kilómetros, superaría ligeramente la presencia castrense de EEUU en Afganistán, donde en estos momentos combaten unos 14,000 soldados norteamericanos. Estas cifras y el hecho de que, en vez de recurrir a la Guardia Nacional, como es habitual en estos casos, el Pentágono haya optado por movilizar al ejército regular, han llevado a numerosos medios y expertos a denunciar que detrás de la medida se esconde una maniobra electoral. El secretario de Defensa de EEUU, James Mattis, tuvo que salir al paso de estas críticas que, en definitiva, acusan al Pentágono de prestarse a un turbio juego político. “El apoyo que le prestaremos al Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) es un apoyo práctico. No, no hacemos puestas en escena en este departamento”, aseguró Mattis con gesto serio. El lunes, el Gobierno anunció el despliegue de unos 5,200 militares en el límite sur para afrontar la llegada de las dos caravanas de migrantes. Apenas un día después, el comandante del Mando Norte de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, el general Terrence J. O’Shaughnessy, aclaró que esa cifra, lejos de ser el tope era el mínimo, y dijo que el número final dependería del las necesidades del DHS, algo que confirmaron las palabras de Trump. El general recalcó que, pese a tratarse de tropas regulares que operarán con su armamento habitual, la misión de los soldados, que estarán instruidos para evitar el uso de la fuerza, será respaldar a los agentes fronterizos. Su misión, remarcó, será prestar apoyo a las fuerzas de seguridad en cuestiones de vigilancia y logísticas. EFE
Estrategia Expertos señalaron que desde el punto de vista político son varias las ventajas para Trump de usar las tropas regulares.