Diario La Prensa

¿Agradece usted?

- Emilio Santamaría POSITIVO@EMILIOSANT­AMARIA.COM

Hace al gunos años, la insta lación de los cursos Dale Carnegie en San Pedro Su la se encontraba en el edificio Martín ez Valen zuela, al lado derecho dela catedral, frenteal parque central. Desde mi oficina solía ver aun vaga bundo, alto, descalzo, con el pelo enmarañado porno haberlo peinadoen meses, vesti doconun simple pantalón. Lagente semetía gratuita mente con aquel enajenado haciéndole bromas pesadas. Decidí contactar lo y averiguar algo sobre quién era y cómo había llegado a ese estado. Una mañana compré una ración de pollo frito y se la ofrecí. Su mirada pasó sobre mí como si yo fuera totalmente transparen­te y simplement­e siguió caminando. Alguien me dijo que era hijo de una familia prominente de San Pedro. Yo tuve el poco tino de contactar los y ellos lo negaron amable pero enfáticame­nte. Un amigo me aseguraba que había oído que se trataba de un nicaragüen­se que huí a rumbo a los Estados Unidos y que, al sera saltado, los golpes que recibió provoca ron su locura. Obtuve mil y una versiones sobre el extraño personaje, tantas como gente a quien pregunté. Quizá la más insólita fue la de que se trataba de un marino fin landés que había perdido el barco en Puerto Cortés y que al no poder se comunicar con nadie se había vuelto loco. Nuestras instalacio­nes cambiaron albo u levard Los Próc eres, en Ríode Piedras, y de jédever lo. Nun casabré quiénes y cómo fue que perdió la razón, pero obtuve una enseñanza de esto. Debo estar muy agradecido con Dios porque a mí me permite pensar con alguna claridad y realizar mi trabajo, aélno. Por una insondable y extraña razón no puede concebirla­s ideas que le ayudarían a vivir mejor. Pienso que el principio de la prosperida­d viene de agradecerl­o que ya tenemos .¿ Estamos vivos ?¿ Podemos pensar y aprender ?¿ Tenemos la oportunida­d de mejorar nos? Charles A. Lindbergh, el héroeque en una avioneta de un motor llamada Espíritu de San Luis cruzó solitario el Atlántico, años después, cuando naufragó y estuvo quince días perdido en el mar, al ser rescatado declaró que si tenemos suficiente agua para tomar y algo de comida tenemos bastantes razones para agradecer a Dios. LO

NEGATIVO: Poner un gran énfasis en lo que no tenemos amargándon­os porello. LO POSITIVO: Contar nuestras bendicione­s y agradecer a Dios por ello.

EL PRINCIPIO DE LA PROSPERIDA­D VIENE DELAGRADE CIMIENTO Y EL RECHA ZODE LA AMAR GURA POR LO QUE NO SETIENE

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Honduras